Viendo TV y reflexionando sobre la vida después de la muerte: Así pasó sus últimos días la reina Isabel II
- Por Nicolás Escárate
El pasado jueves 8 de septiembre se confirmó el fallecimiento de la reina Isabel II a sus 96 años, hecho ocurrido en la residencia de Balmoral, en la que la monarca solía pasar todos sus veranos.
La autoridad solía pasar los tres meses de verano en esta residencia, considerada como una de sus favoritas, en compañía de toda su familia y asesores.
¿Cómo fueron los últimos días de la reina?
Isabel II hizo el arribo a Balmoral el pasado 23 de julio, por segundo año consecutivo sin su amado esposo, el príncipe Felipe, quien murió en abril de 2021.
La monarca abordó un helicóptero privado para arribar a la residencia, y se esperaba que su estadía se extendiera hasta octubre, retomando en ese entonces algunas de sus labores como monarca, reveló el medio The Sun.
Hasta allá llegó con el uno de sus pajes más cercanos, Paul Whybrew, y su sargento de armas, Barry Mitford, quienes se encargaban de llevarle a diario el Racing Post, publicación británica que cubre lo que son las carreras de caballo, de las cuales la reina era completamente fanática.
Tras leer el periódico, la monarca se sentaba a ver televisión, a veces acompañada de Angela Kelly, su mano derecha, quien la vistió hasta el último de sus días de vida.
El fin de semana previo a su deceso, la reina Isabel recibió al Moderador de la Asamblea General de la Iglesia de Escocia, el Dr. Iain Greenshields, con quien cenó el sábado 3 de septiembre. Al otro día, el domingo, ambos conversaron de temas profundos, como las creencias de cada uno sobre la vida después de la muerte.
Dos días después, el martes 6 de septiembre, Isabel recibió a Liz Truss, la nueva Primera Ministra de Inglaterra, con quien conversó durante 30 minutos y selló el encuentro con unas fotografías, las últimas en las que la reina aparece con vida.
Finalmente, el jueves 8 de septiembre, la reina falleció en su cama, llegando a acompañarla en sus últimos minutos sus hijos, el rey Carlos III y la princesa Ana, quienes se encontraban en Escocia por otros compromisos, llegando rápidamente a Balmoral a darle el adiós final.
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