Pocos besos en las novelas turcas: Esta es la razón por la que casi no salen en la pantalla
Las polémicas generadas por los besos en las novelas turcas no son nuevas, pero vuelven a florecer en medio del boom de estas producciones que cada vez atrapan a más seguidores alrededor del mundo, y especialmente al público de habla hispana.
Estos dramas ganan cada vez más terreno desde que “Amor Eterno” se posicionó en el ranking de la televisión latinoamericana como el drama de ficción más visto, afirma People en Español.
Protagonizada por los actores Burak Özçivit (Kemal) y Neslihan Atagül (Nihan) esta serie originalmente estrenada en 2015 es apenas una de las tantas que deben ser sometidas a censura por parte del Consejo Superior de la Radiotelevisión de Turquía (RTUK), como lo indica la reconocida revista de espectáculos.
¿Por qué casi no hay besos en las novelas turcas?
El organismo rector realiza una especie de filtro en las producciones generadas desde ese país. Si se incumplen las directrices del RTUK y se dan escenas “subidas de tono”, los propietarios de las series o dramas pueden llegar a pagar sumas millonarias en multas.
La censura en Turquía para las producciones televisivas va en aumento. Así lo hizo saber al diario español El País el actor turco Furkan Andiç de la serie “En todas partes tú”, quien dijo que años atrás había menos restricciones y que los besos en pantalla actualmente no pueden durar más de tres segundos.
Netflix canceló un rodaje por la censura
Los niveles de censura en Turquía son tan elevados que la telenovela “Love in the air” recibió una sanción administrativa de parte del gobierno musulmán de Recep Tayyip Erdogan, después de que aparecieran en una escena los protagonistas Hande Erçel y Kerem Bürsin dentro de un jacuzzi.
El RTUK justifica las onerosas multas en el contenido erótico de las escenas que contradicen las costumbres y las tradiciones de la familia turca. También se tiene totalmente prohibido exponer historias con romance entre homosexuales.
Las secuelas de estas restricciones afectaron a otra gran industria de la producción de películas y series como Netflix. Según la agencia EFE, la plataforma streaming canceló en 2020 un rodaje en Turquía debido a que un filme incluía en el guión a un personaje gay, por lo que el gobierno turco negó el permiso correspondiente.
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