"Donde guardo mi paciencia": Sharon Fonseca es criticada por el tamaño de su cartera
A través de las redes sociales, la modelo venezolana Sharon Fonseca (25) sorprendió con un pequeño álbum de fotos en el que viste un look de invierno en tonos tierra.
Su objetivo era comentarle a sus seguidores el “nuevo peinado” que usa, luego de que su hija Blu Jerusalema le tirara el cabello tan duro que, según ella, la llevó a tomarse el pelo a diario.
“Cabello arriba se ha dicho estos días, especialmente con la baby. Les cuento que ayer me jaló el pelo tan fuerte que esta mamá tuvo que aprender su lección”, escribió.
La cartera
Pese a que estaba contando una “experiencia” de la maternidad, lo que más llamó la atención del público fue su diminuta cartera, pues en ella -con suerte- podría entrar la cédula de identidad y las tarjetas bancarias.
“¿Qué llevas en esta pequeña bolsa?”, “La cartera donde guardo mi paciencia”, “Solo cabe las llaves y el dinero”, “Que puede caber en esa carterita”, “Amo el 'pequeño' bolso”, “Madre mía, qué guardas en ese bolso. Solo un labial”, “¿Qué puedes poner en esta bolsa?”, “Tan pequeña y seguro que vale más que un año de mi salario”, fueron algunos de los comentarios en la plataforma digital.
Para nadie es un secreto que Sharon Fonseca es amante de la moda, no en vano lanzó su propia línea de ropa elegante en Estados Unidos. Sin embargo, desde el nacimiento de su primera hija, la venezolana no ha podido actualizar su repertorio, porque está dedicada al 100% a su bebé, quien nació con un problema congénito.
A través de su cuenta de Instagram, Sharon muestra sus looks y cambios de estilos, en los que suele obtener aplausos por parte de sus miles de seguidores en la web.
La enfermedad de Blu Jerusalema
El empresario Gianluca Vacchi (53) y la modelo revelaron en sus redes sociales la anomalía congénita con la que nació la pequeña Blu Jerusalema.
Se trata del “paladar hendido”, que según consigna Mayo Clinic, son orificios o hendiduras en el labio superior o en el paladar -o en ambas partes-, que se producen cuando las estructuras faciales del feto no se cierran por completo durante la etapa de gestación.
Los bebés que sufren de este problema, presentan dificultades en la alimentación, ya que corren el riesgo de que los líquidos o las comidas salgan por la nariz. Además, tienen mayor probabilidad de presentar infecciones de oídos de caracter crónico.
Según confirma el portal de salud, este problema congénito se puede corregir, pues en casi todos los casos se puede hacer una serie de cirugías para restaurar el funcionamiento adecuado y obtener una apariencia más “normal”, con una cantidad mínima de cicatrices.
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