Buscan cambios en el pago mínimo de las tarjetas de crédito: ¿En cuánto subiría el monto?
Las tarjetas de crédito son instrumentos de pago que permiten adquirir bienes o pagar servicios ocupando el monto de crédito disponible. El dinero utilizado se paga de manera posterior al banco o entidad financiera, ya sea de manera total, o financiado solo el pago mínimo.
El pago mínimo de la tarjeta de crédito es la posibilidad que tienen los clientes de pagar menos del valor facturado (utilizado), con el fin de no caer en mora por el saldo adeudado. Sin embargo, quienes optan por el pago mínimo, luego deben pagar intereses por el dinero que no pagaron.
Actualmente, el monto del pago mínimo es determinado por la institución financiera que emite la tarjeta, sin embargo, esto cambiaría, ya que la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) publicará la versión final de la normativa que modifica el pago mínimo de las tarjetas de créditos.
¿En cuánto aumentaría el pago mínimo de la tarjeta de crédito?
El pago mínimo de la tarjeta de crédito varía dependiendo de cada institución financiera, sin embargo, en promedio, corresponde al 4% del monto facturado.
Con la propuesta normativa de la CMF, el monto del pago mínimo aumentaría, ya que se incluiría un porcentaje de amortización del 5% del capital insoluto (del dinero adeudado). De ese modo, el pago mínimo subiría a un 25% del monto facturado, informó Pulso.
A modo de ejemplo, si actualmente una persona tiene una deuda de $100.000 en su tarjeta de crédito, cuando facture puede pagar un monto mínimo de $4.000 (considerando el 4%). Con la nueva normativa, el pago mínimo a realizar subiría a $25.000.
Los efectos que tendría aumentar el pago mínimo de la tarjeta de crédito
La medida de aumentar el pago mínimo de la tarjeta de crédito es parte de una ley impulsada por el Gobierno que tiene como objetivo combatir el sobreendeudamiento.
La legislación aprobada por el Congreso en 2024, faculta a la CMF para "regular la formulación y los componentes del pago mínimo en tarjetas de crédito, así como de normar las situaciones excepcionales en las que las entidades podrán eximir a los deudores de la obligación de dicho pago mínimo".
La normativa estuvo en consulta hasta diciembre de 2024 y respecto a los efectos que tendría, la CMF detalló que "una regulación que aumenta el pago mínimo podría incrementar la carga financiera a corto plazo, pero también reduciría el plazo total de pago, promoviendo una gestión financiera más saludable".
En esa línea, precisaron que "se espera que esta normativa beneficie a los deudores al limitar el horizonte de pago e incorporar la amortización del capital, lo que reduciría los costos totales del crédito y la probabilidad de morosidad", consignó el citado medio.
También explicaron que "si bien el pago mínimo puede aliviar la presión inmediata de caer en morosidad, con el fin de evitar consecuencias financieras a largo plazo, es esencial gestionar el saldo de la tarjeta con prudencia".
La CMF puntualizó que "los riesgos asociados con la acumulación de intereses y la extensión del tiempo necesario para saldar la deuda pueden, a largo plazo, contribuir a mayores niveles de sobreendeudamiento y morosidad. Por ello, es relevante regular el pago mínimo, ya que, si su cálculo no considera la amortización del capital insoluto, su uso continuado puede tener un impacto negativo en las finanzas personales de los deudores".
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