Desaparición de María Ercira: Lo que dice el informe de la PDI tras peritaje a celulares de familiares y trabajadores del fundo
¿Qué pasó?
La Policía de Investigaciones (PDI) interceptó los teléfonos celulares de más de una decena de personas con alguna relación en el caso de la desaparición de María Ercira Contreras, adulta mayor de 86 años a quien se le perdió el rastro el 12 de mayo, cuando celebraba el Día de la Madre junto a su familia en un restaurante ubicado en el Fundo Las Tórtolas, en la comuna de Limache, en la región de Valparaíso.
De acuerdo a lo que publicó este lunes La Tercera, medio que tuvo acceso al informe que elaboró la PDI a raíz de los peritajes realizados, las personas analizadas incluyen a familiares, como Maximiliano Hernández Contreras, hijo de la desaparecida; y Rodrigo Cortez, quien es pareja de Natalia, una de las nietas.
Además, la policía civil pinchó los celulares de la administradora del fundo, Mónica Kleinert, y de dos trabajadores que se dedican a cuidar el recinto, todo previa autorización del magistrado Daniel Henríquez, del Juzgado de Garantía de Limache.
¿Qué dice el informe de la PDI sobre los teléfonos celulares interceptados?
Según el citado medio, Maximiliano, hijo de María Ercira, tuvo su celular apagado antes, durante y después del almuerzo en que se produjo la desaparición. "Esta situación suscita diversas hipótesis, como un posible cese voluntario del uso de la línea, problemas técnicos en el dispositivo, desconexión de la red celular o la inserción de otra SIM card. Es esencial un análisis más detallado para entender las causas de esta inactividad de alrededor de 37 horas", señalaron desde la PDI.
En el informe también se consigna que el hombre describió a su madre como "una mujer independiente y activa, aunque con algunos problemas de memoria y una rodilla derecha que, si bien no le impedía caminar, limitaba su movilidad en terrenos complejos. Hasta la fecha nunca se había extraviado".
Quien también fue incluido en el documento de la PDI fue Rodrigo Cortez. En entrevista con los detectives, la pareja de una de las nietas de María Ercira dijo que la adulta mayor en ocasiones "olvidaba ciertas acciones, como guardar objetos", pero afirmó no saber si "tenía un diagnóstico médico".
Esta persona también apagó su teléfono en el almuerzo del Día de la Madre, instancia en la que se hizo presente. "Este lapso inactivo de aproximadamente 15 horas resulta especialmente relevante porque coincide con una interrupción similar en la línea telefónica de Maximiliano Hernández, hijo de la víctima, quien también presentó una ausencia de actividad desde el 11 de mayo hasta las 23:26 horas del 12 de mayo", menciona el texto.
El análisis a los teléfonos de la administradora y los trabajadores del Fundo Las Tórtolas
Mónica Kleinert, administradora del Fundo Las Tórtolas, propiedad de su madre, igualmente fue parte de los trabajos que lleva a cabo la policía, aunque actualmente está en Estados Unidos. La mujer "expresó consternación y compromiso con la investigación, subrayando que el fundo ofreció toda la colaboración posible y que este tipo de incidente nunca había ocurrido en el establecimiento", expone el informe.
En cuanto a su celular, se precisa que "el 12 de mayo su línea muestra actividad constante en Limache, predominantemente en estaciones base cercanas al Fundo Las Tórtolas. Se registran 42 llamadas en total, incluidas comunicaciones destacadas: dos llamadas a las 20.19 y 20.25 con Roberto Cantillana (contacto y amigo de Maximiliano Hernández) y varias llamadas al portero Jacinto Ayala y al sistema de apertura del portón del fundo. Esta actividad indica un flujo elevado de comunicaciones dentro del lugar hasta las 23.51, reflejando consistencia con lo declarado"
"Nadie había salido a pie"
En tanto, Jacinto Ayala, cuidador del fundo desde hace 21 años y residente del lugar, relató a la PDI que el 12 de mayo hubo "gran concurrencia en el fundo". Aquella jornada, explicó, un hombre le preguntó si había visto a su madre (María Ercira), a lo que él respondió que "nadie había salido a pie".
"Luego la dueña del lugar informó sobre la desaparición, y él revisó los alrededores sin éxito", añade el documento, precisando que "finalmente, Ayala señaló que en sus años de servicio nunca había ocurrido un caso similar, ya que el lugar suele ser familiar y seguro para los visitantes".
El informe de la policía concluye sobre el trabajador que "el análisis de tráfico telefónico y georreferenciación realizado sobre la línea asociada al sujeto muestra una actividad consistente en el área del Fundo Las Tórtolas, donde el dispositivo fue ubicado durante el día y momento de los hechos a través de estaciones de base cercanas". Además, sugiere indagar llamadas que hizo meses después para "establecer posibles relaciones relevantes en la investigación".
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