Trabajadora fue despedida por estar embarazada y ahora deberán pagarle una millonaria indemnización
- Por Diego Alonzo
¿Qué pasó?
Una mujer fue despedida de su trabajo, en abril de 2023, por estar embarazada ahora y la empresa deberá pagarle una millonaria indemnización. En total, la afectada recibirá más de $7 millones, luego de prestar funciones, sin un contrato formal, en una compañía ubicada en la comuna de Los Ángeles, región del Biobío.
¿Cómo ocurrió el despido?
Según indica el fallo de primera instancia del Juzgado de Letras del Trabajo de Los Ángeles, la afectada se percató en febrero del año pasado de que estaba embarazada, pero no le avisó a su jefatura por temor a su reacción. No obstante, le comentó la noticia a una colega en las instalaciones del recinto donde trabajaba.
Considerando que las cámaras de seguridad tenían audio, durante esa misma semana el empleador se enteró de la noticia, pero ella siguió ejerciendo sus labores con normalidad hasta abril.
A partir de allí, empezó a preocuparle su situación laboral, que hasta ese instante era informal, y por lo cual no podía acceder a pre ni postnatal. Fue así como le solicitó a la empresa formalizar su contrato para tener estos derechos, pero la compañía se negaba constantemente a dárselos.
La trabajadora, al percatarse de esta situación, tuvo la intención de ir a la Inspección del Trabajo, pero en ese instante recibió un llamado de su jefa directa, quien le comentó, en tono amenazante, que "si vas a la Inspección del Trabajo te despiden de inmediato, pero si no vas, puedes seguir trabajando sin contrato".
Pese a aquello, la afectada decidió ir la Inspección del Trabajo, frente a lo cual terminó siendo despedida el 3 de abril.
La millonaria indemnización
A raíz de lo anterior, y a más de un año del despido, el Juzgado de Letras de Los Ángeles acogió la denuncia y ordenó el pago de $7 millones a la demandante por concepto de indemnización. Además, se determinó pagarle $700.000 por el concepto de indemnización sustitutiva del aviso previo.
En el fallo, el magistrado estableció que la empresa denunciada vulneró el derecho constitucional a la integridad física y psíquica y a la no discriminación de la trabajadora, que no contaba con contrato de trabajo y que había sido despedida verbalmente cuando estaba embarazada.
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