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Inmuebles municipales hipotecados y una causa en Fiscalía: El legado de Olavarría tras el fallido hospital de Colina

El 7 de agosto de 2019 el entonces alcalde Mario Olavarría (UDI) festejaba -con espumante en mano y junto a varios vecinos- una importante noticia: el presidente Sebastián Piñera había anunciado que el anhelado hospital de la zona norte de la Región Metropolitana se construiría en Colina.

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Se trataba de uno de los logros más importantes de Olavarría en sus casi 20 años al mando de la comuna, que beneficiaría a más de un millón de habitantes de las comunas de Colina, Tiltil, Lampa, Quilicura, Conchalí, Recoleta e Independencia. Un hito perfecto para culminar su último periodo como alcalde de Colina, que terminaría en junio de 2021.

Pero la alegría duró hasta 2022. Ese año, el Ministerio de Salud detuvo el avance del proyecto en Colina y la Contraloría cuestionó la forma en que el municipio adquirió el terreno. Junto con eso, los cuestionamientos en contra de Olavarría, y por el nexo entre él y la propietaria del terreno -quienes se conocían desde hace años-, no tardaron en llegar.

Fuente: chicureo.com

 

La situación era compleja. La Municipalidad de Colina ya había pagado 50 mil UF (casi $1.900 millones al valor actual) por la venta del terreno. Un antecedente que se suma a que en el proceso de compraventa, el organismo comunal hipotecó siete inmuebles -entre ellos un establecimiento educacional- que podrían ser cobrados por la vendedora en caso de que no se cumpliera el contrato.

Esa situación obligó a la actual alcaldesa Isabel Valenzuela (UDI) a presentar una demanda -que está en curso- para intentar recuperar el dinero que la Municipalidad de Colina ya había pagado. Un proceso que corre en paralelo con una investigación que lleva a cabo la Fiscalía de Alta Complejidad Centro Norte, sobre la transacción comercial.

A juicio del presidente de la Fundación Defendamos La Ciudad, Patricio Herman la compra del terreno corresponde a una “operación trucha”, porque “hubo un trato directo y se adquirió a un precio muy alto fuera de mercado". “Mario Olavarría le compró a una particular un terreno no idóneo para construir un hospital, eso lo sabía todo el mundo”, remarcó.

Mario Olavarría, en tanto, trabaja en su campaña para alcalde por la comuna de Lampa -como candidato de Chile Vamos-, y se defiende ante las acusaciones en su contra.

“La decisión de no materializar la construcción del hospital en ese terreno fue del Ministerio de Salud, no del municipio. (...) Es una lástima que su construcción se siga postergando”, dijo el militante UDI a Mega Investiga.

$2.900 millones y siete inmuebles municipales hipotecados

En 2018, para enfrentar la falta de un centro hospitalario en la provincia de Chacabuco, el gobierno de Piñera inició la búsqueda de un terreno de cinco hectáreas que fuera donado de forma gratuita a los ministerios de Salud y Obras Públicas.

La Municipalidad de Colina evaluó los predios de la comuna y postuló tres. Uno de ellos abarca 50.014 m2 y fue el elegido por la comisión técnica de aquel gobierno conformada para esa tarea. Se trata de un terreno de propiedad de una vecina del sector Chicureo, Carmen García Reus, una antigua conocida del entonces alcalde Olavarría, quien no logró ser contactada por este medio.

Tras la selección, la municipalidad compró el predio a través de la Corporación Municipal de Desarrollo Social de Colina, lo que se concretó el 24 de noviembre de 2020. El valor de la venta era de 100 mil UF (casi $2.900 millones de ese entonces), que serían pagados en cuotas: la primera de 20 UF -cuando se firmó el contrato-, y las siguientes en 10 mil UF cada una, de forma semestral.

Y como el valor total de la compra sería cancelado fraccionado, para dar cuenta del cumplimiento de las obligaciones del contrato, la Municipalidad de Colina acordó hipotecar siete inmuebles de dominio municipal, entre los que había un establecimiento educacional.

El proceso iba bien encaminado, a tal punto que el 14 de diciembre de 2020 -previo a que el municipio pagara todas las cuotas- se modificó el registro de propiedad del terreno, en el Conservador de Bienes Raíces. Ya no estaba a nombre de García Reus, sino que a título de la Corporación Municipal de Desarrollo Social de Colina.

Los primeros reparos

Todo indicaba que el hospital de la zona norte -que contemplaba 368 camas y que beneficiaría a más de un millón de personas- se emplazaría en Colina, lo que se había convertido -sin duda- en uno de los sellos más importantes de Olavarría como alcalde de la comuna.

Incluso, el Consejo Regional Metropolitano había visado, en diciembre de 2021, la modificación del Plan Regulador Metropolitano de Santiago que era necesaria para construir el hospital de la zona norte -pues el terreno tenía una calificación de zona rural-. Sólo faltaba que el Gore de la RM solicitara a la Contraloría la toma de razón de esa aprobación.

Sin embargo, el 12 de mayo de 2022, la ministra de Salud de la época, María Begoña Yarza, le solicitó a Claudio Orrego que no iniciara la tramitación de ese proceso, argumentando “que el análisis de alternativas de localización para el futuro Hospital Zona Norte no se encuentra concluido”.

El 31 de mayo de ese mismo año, en tanto, el Servicio de Salud Metropolitano Norte pidió a la alcaldesa Valenzuela enviar propuestas de terreno para la construcción del recinto hospitalario, informando que el proyecto “se encuentra calificado con Falta de Información (FI) por el Ministerio de Desarrollo Social, debido a la falta de definición de un terreno viable para el emplazamiento del nuevo hospital”.

El subsecretario de Redes Asistenciales de la época, Fernando Araos explicó que efectivamente se inició un nuevo proceso de búsqueda de predios para construir el hospital, ya que el terreno de Colina “nunca logró tener la aprobación del Ministerio de Desarrollo Social para seguir adelante con las evaluaciones”.

Según la ex autoridad, las principales deficiencias de aquel lugar era la falta de información respecto al uso de suelo y a las obras civiles necesarias para poder habilitar la construcción. “De hecho, la administración anterior del gobierno del ex presidente Piñera (...) ya había iniciado evaluaciones de otros terrenos distintos al de Colina”, agregó.

Pese a la negativa, Valenzuela postuló nuevamente el terreno vendido por García Reus, pero fue rechazado de manera tajante. La respuesta del Servicio de Salud Metropolitano Norte llegó el 14 de julio de 2023: “Se hace inviable actualmente el poder considerar dicha oferta”.

La justificación era la imposibilidad de construir el hospital en aquel paño, porque “el terreno propuesto se encuentra fuera del Radio Operacional de la Empresa Sanitaria”, lo que implica, según el documento, costos de obras -de 190 mil UF adicionales- complementarias de urbanización, agua potable y alcantarillado, como también de obras de mitigación.

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El portazo de Contraloría

Pero no sólo los organismos estatales tuvieron reparos. Un año antes, en agosto de 2022, en respuesta a diversas denuncias, la Contraloría había realizado observaciones por la adquisición del terreno. Por lo que determinó instruir un sumario disciplinario en la Municipalidad de Colina, cuya investigación aún está en curso, de acuerdo a lo recabado por Mega Investiga.

El ente fiscalizador, en detalle, estableció que no se ajustó a derecho que el organismo comunal utilizara a la Corporación Municipal de Desarrollo Social para adquirir el predio, pues “resultaba ajeno a los fines propios de esa corporación”.

Además, constató que no existen antecedentes que sustenten “que el precio pactado (en la compra) haya correspondido al justo valor comercial a pagar”; y estableció que en el paño no se podía emplazar una construcción de esas características sin la modificación del plano regulador metropolitano.

También, finalmente, reprochó el actuar del entonces alcalde Olavarría por no resguardar la eficaz administración de los recursos públicos al momento de hipotecar inmuebles municipales, considerando que en ese momento la construcción del hospital era “una mera situación hipotética”.

Ante estos antecedentes y la gravedad de lo detectado por Contraloría, el ex edil y hoy candidato por Lampa, Mario Olavarría, comentó a Mega Investiga que la compra se gestionó a través de la corporación porque “es la encargada de gestionar la salud primaria”.

Mientras que para explicar por qué no se realizó una tasación antes de concretar el negocio con la dueña del terreno, el ex jefe comunal apuntó al Ministerio de Salud, pues desde su punto de vista la zona para levantar el hospital fue seleccionada por ellos.

La alcaldesa Valenzuela, por su parte, explicó que “el valor del terreno está de acuerdo a tasaciones de los terrenos aledaños” y descartó que existiera un sobreprecio. Además, ha sido crítica con la resolución de la Contraloría, pero aseguró que han respetado el oficio.

“Yo discrepo de la interpretación de la Contraloría, pero acatamos la instrucción e iniciamos el proceso disciplinario”, comentó la jefa comunal, quien indicó que una vez que llegó el oficio el municipio dejó de pagar las cuotas correspondientes a la compra del terreno.

Si bien la edil solicitó en dos ocasiones -2022 y 2023- reconsideraciones a la Contraloría tras el primer oficio, en ninguna tuvo éxito y ambas fueron desestimadas por el ente fiscalizador.

El camino judicial

Como la utilización del terreno para la construcción del hospital era, a todas luces, inviable, la alcaldesa Valenzuela dio un giro y optó por iniciar un camino judicial para conseguir que se restituyeran los montos pagados.

Así, en junio de 2023, la Corporación Municipal de Desarrollo Social de Colina demandó a García Reus -mediante una acción resolutoria- con el fin de dejar sin efecto el contrato de compraventa del predio, argumentando que la finalidad de la adquisición -que era la construcción del recinto hospitalario- no se concretará, pues el terreno fue desechado por las autoridades gubernamentales.

El proceso está en etapa preparatoria”, sostuvo la jefa comunal a Mega Investiga, y agregó que se llegó a esta instancia con el fin de “restituir los montos pagados para resguardar el patrimonio municipal”. A pesar de ello, responsabilizó al actual gobierno de desechar la construcción del hospital en el predio que había comprado el municipio.

En la contestación de la demanda, García Reus enredó aún más este conflicto al evidenciar problemas y una mala gestión del municipio. Indicó que durante el proceso cumplió con la obligación de enajenar el terreno, pero que la Corporación Municipal de Desarrollo Social de Colina “no ha hecho lo propio con su deber de pagar íntegramente el precio en la forma pactada”.

Incluso, solicitó que en caso de que se acceda a la rescisión del contrato, la demandante se haga cargo de entregar el terreno con las mismas características que tenía el lugar previo a la firma del acuerdo comercial: subdividido en lotes y no como un paño fusionado. De no ser acogido esa solicitud, exigió una indemnización de 1.500 UF (casi $57 millones).

Lo que también se está discutiendo en el proceso judicial son las hipotecas ofrecidas por el municipio de Colina. Olavarría explicó que sólo se hipotecaron “dos inmuebles para garantizar el pago del precio” y que “con el término del juicio las hipotecas se levantarán y quedarán sin efecto”.

Sin embargo, la alcaldesa Valenzuela informó a Mega Investiga que “fueron un total de siete hipotecas”, pero que hasta el momento García Reus ha devuelto dos, por lo que quedan cinco inmuebles hipotecados que resolver, entre los cuales hay un establecimiento educacional.

Un cúmulo de acusaciones mixtas y repartidas que no sólo están en la justicia civil. La Unidad de Alta Complejidad de la Fiscalía Centro Norte ha mirado de cerca todo este conflicto y por ahora investiga este caso de manera desformalizada a la espera de los resultados finales de los sumarios de la municipalidad y Contraloría.

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