Logo Mega

Este aviso se cerrará en segundos

La "verdad" de Leonarda: Un cuaderno con apuntes, tres declaraciones y por qué grabó el audio en oficina de Hermosilla

"Pregunta: ¿Por qué grabó dicha reunión?"

"Respuesta: Porque aparecían mencionadas mi empresa y la de mi marido y también necesitaba encarar a Rodrigo Topelberg si conocía de esta situación. Pensé que Rodrigo no me iba a creer, porque su mejor amigo era Daniel Sauer, por eso grabé".

Quien responde es Leonarda Villalobos, en medio de una declaración prestada en la Brigada de Delitos Económicos de la Región Metropolitana el 22 de marzo. Era la tercera vez que testificaba en esta arista relacionada al Caso Audios, el que se abrió precisamente cuando se conoció el material que ella grabó de una reunión donde participó junto a Daniel Sauer y Luis Hermosilla.

LO ÚLTIMO

Villalobos es uno de los personajes más importantes de la trama que hoy tiene a los hermanos Daniel y Ariel Sauer en prisión preventiva tras ser formalizados por estafa, ejercicio ilegal de la actividad bancaria, administración desleal, lavado de activos y otros delitos tributarios.

Además de los hermanos Sauer, fueron imputados en este causa su padre Alberto, su ex amigo y socio Rodrigo Topelberg, y los dos ex altos ejecutivos de Factop Darío Cuadra y Luis Flores, cuya audiencia inició el lunes y terminó durante la noche del miércoles.

Son alrededor de 15 mil páginas de carpeta investigativa, que el Ministerio Público recopiló para imputar nueve delitos a los empresarios, ligados a la Comunidad Judía. Antecedentes que irritaron a los hermanos Sauer, en especial a Daniel, cuya molestia fue expresada por su abogado Octavio Sufán en el estrado.

"El verdadero Caso Audios, donde Leonarda Villalobos hace una grabación espuria, ilegal, y que finalmente es lo que le interesa a la opinión pública, el Ministerio Público no lo ha investigado”, refutó en un tono desafiante.

Y no se quedó ahí. Sufán lanzó más dardos a la indagatoria de la Fiscalía Oriente.

"15 mil páginas. Ni el uno por ciento de esas 15 mil páginas tiene la otra investigación, la que a la opinión pública le interesa. No ha avanzado absolutamente nada", agregó.

Lo que es cierto, es que entre esas miles de páginas, figuran aportes relevantes de parte de la abogada que grabó el audio en primer lugar. Tres declaraciones, dos como imputada y una como víctima, además de apuntes personales que Villalobos tomó a mano, hoy son piezas importantes para acreditar los delitos económicos y de lavado de dinero que persigue el Ministerio Público.

Todo partió por un auto

El 23 de noviembre, Leonarda declaró por primera vez, en calidad de imputada, ante el fiscal jefe de la causa Juan Pablo Araya. En una confesión que duró 4 horas y 32 minutos, Leonarda se enfocó en contar su historia: quién es, cómo llegó a trabajar con los Sauer, y por qué invirtió hasta sus ahorros con ellos.

Dice que entre 2016 y 2017 conoció a Alberto Sauer, padre de Daniel y Ariel, que llegó a verla a su oficina en el Grupo Steuern, para pedirle ayuda por un giro que le habían hecho en el SII vinculado a un vehículo marca Jaguar.

Alrededor de 10 días después, Alberto la volvió a llamar pidiéndole que vaya a su oficina. Ahí le presentó a sus hijos, Ariel y Daniel, y al socio Rodrigo Topelberg. Le preguntó por su padre, Osvaldo, y le comentó que ellos se habían conocido.

Desde ese día, el grupo empezó a solicitar los servicios de Leonarda, principalmente para hacer gestiones en temas tributarios, lo que le significó a la abogada cuantiosos honorarios.

"Yo firmé un contrato con ellos donde se pactaba el pago y el pago sumaba $140.000.000 por esta gestión: El RAV de Alberto Sauer y el Jaguar que finalmente tuvo que pagar y la revisión de las empresas de Daniel Sauer ante el SII", indicó.

En definitiva, Leonarda informó a la policía que tenía tres contratos que corrían en forma separada: uno con Daniel Sauer, otro con Alberto Sauer y con el socio Rodrigo Topelberg.

La abogada contó, además, que a Factop le emitía facturas por concepto de asesorías mensuales, las cuales tenían un valor de $1.500.000. Sin embargo, hubo un momento en que esos honorarios dejaron de ingresar a su cuenta.

"... El año 2021, 2022 y 2023, no me pagaron, argumentando que al otro día realizarían mis pagos, y así, fueron pasando los años y yo le propuse a Ariel Sauer que todo el dinero que me adeudaba, lo invirtiera, presumiendo que era así, debido a que en forma mensual, yo recibía $4.000.000 por concepto de mis intereses", señaló Villalobos, quien comentó que dado el manejo bursátil de Factop y la confianza que fue generando con sus dueños, decidió invertir sus ahorros en la empresa.

Investigando con lápiz y papel

El proceso de investigación que la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) llevó contra la corredora STF Capital, habría sido el "punto de quiebre" en la relación entre Villalobos y sus clientes.

A inicios de junio pasado, la CMF inició un proceso sancionatorio contra STF Capital y contra Luis Flores, Daniel y Ariel Sauer.

"... Cuando se libera el expediente de la CMF, es decir, la primera quincena de junio del año 2023, donde procedí a imprimir, caratular y rayar el expediente, el cual leí, logrando concluir que había situaciones que desde mi llamada de atención se desprendían otras aristas”, dice Leonarda en su segunda declaración, el 6 de diciembre.

Entre sus confesiones, la abogada menciona que fue analizando uno por uno los antecedentes, y averiguando por otras fuentes información respecto a las 56 empresas que habrían emitido facturas. "Fui buscando hito por hito, lo glosé, supe quién había ido a declarar, lo que se había dicho en la declaración, ni siquiera dormí para poder estudiar el expediente y de esta forma, yo sola pude obtener mis conclusiones".

Hoy, esos cuadernos con anotaciones de Leonarda Villalobos, fueron entregados como evidencia en la investigación que lleva adelante el Ministerio Público.

Fue mediante ese levantamiento que Villalobos, según relata, se percató del enjambre de irregularidades que agrupaba STF Capital y Factop. Lo cual habría intentado aclarar con otro de sus clientes, Rodrigo Topelberg, pero no fue posible. El ingeniero y fanático del tarot la derivó con su señora Yael Speisky dado que era abogada y podría comprender de mejor forma la investigación tributaria de la CMF y sus posibles consecuencias.

"Reina, ninguna información más a Rodrigo, está colapsado", le dijo Speiksy a Villalobos.

El quiebre con los Topelberg-Speisky

En febrero, Leonarda se querelló contra Alberto, Ariel y Daniel Sauer, además de Rodrigo Topelberg. En el libelo acusó que los involucrados se aprovecharon de ella y dijo haber sacado la peor parte de la historia.

Además de ella, también se querellaron sus hijos, Isabella y Alessandro Bratti Villalobos, reclamando estafa, uso malicioso de instrumento mercantil privado y asociación ilícita.

El 22 de marzo, Leonarda prestó una tercera declaración, esta vez en calidad de víctima en la Brigada de Delitos Económicos Metropolitana. Su primera intervención la ocupó para ratificar todo lo expresado en la querella, y luego los detectives presentes procedieron a preguntarle por hechos relacionados a su participación en Factop y la decisión de grabar el audio.

Comenta que la famosa reunión del 22 de junio la citó Luis Hermosilla para analizar los pasos a seguir frente al informe publicado por la CMF, documento donde se habría dado cuenta de que existían facturas emitidas por su empresa y la de su esposo.

"... Me encuentro con facturas de Steuern y Commercia, tanto emitidas como recibidas desconociendo dichos servicios prestados. Por lo cual, mi disposición era encararlos en la reunión sobre lo que había descubierto”.

Habría sido ese descubrimiento, sumado a su intención de poner los hechos en conocimiento de Topelberg, lo que la motivó a grabar.

"Al día siguiente llamo a Rodrigo, le cuento lo que pasó y pregunto si sabía de todo lo que se trató en dicha reunión. Rodrigo Topelberg me dijo que no era así, así que lo hice escuchar parte de la grabación y me dice que lo vea con Yael, porque ella era su abogada”, comentó Villalobos.

Finalmente, así lo hizo, y envió el audio a la esposa de Topelberg, pues sentía que era parte del mandato que habían acordado como cliente: todo lo relacionado a esta intriga de dinero, poder y engaños referente a sus socios y amigos de toda la vida lo viera con su esposa.

Al explicarle el contenido de ese audio, según declaró Leonarda a la PDI, le planteó que no reenviara ese contenido a otras personas por el impacto que podría generar.

"Animal como se te puede ocurrir que yo haría una cosa así cuando la Titi a mi me grabó y me jodió mi familia”, le respondió Yael Speisky.

Al parecer, según cree a muerte Villalobos, la señora de Topelberg no le cumplió su promesa y filtró la conversación que impactó al país y abrió múltiples investigaciones penales ligadas al ámbito profesional de Luis Hermosilla que terminó con el director de la PDI tras las rejas y fuera de la institución policial.

"Pregunta: ¿Sabe quién más pudo haber tenido acceso a dicha grabación?
Respuesta: No, de hecho, no volví a hablar con Yael”, respondió Leonarda".