"Volver a comenzar a esta edad es difícil": Vecino de 75 años perdió todo en incendio en Viña del Mar
Desde 1974 que Luis Yáñez vive en Lomas Latorre en Achupallas, sector alto de la ciudad de Viña del Mar y una de las zonas más afectadas por los incendios que azotaron a la región de Valparaíso, dejando miles de viviendas reducidas a escombros y cenizas.
El vecino llegó a ese lugar del cerro viñamarino por la crisis habitacional que ya había en ese entonces, siendo líder de las familias que se tomaron el terreno hasta acceder a la casa propia.
Cinco décadas más tarde, ya convertido en un adulto mayor de 75 años, ahora debe enfrentar las consecuencias que dejó el siniestro que consumió otras miles de viviendas. Reconoció que no será una tarea fácil, considerando su edad y la baja pensión que recibe.
"Volver a comenzar a esta edad es difícil"
En conversación con el matinal "Mucho Gusto", el damnificado relató que "luchamos mucho para tener nuestras casitas y ahora siento pena, porque tengo 75 años, volver a comenzar a esta edad es difícil. Se me quemó todo (...) quedé bien sorprendido con que hubo 'mano negra'".
Según acusó Luis, una persona habría provocado las llamas con una herramienta parecida a un soplete: "Ahí se prendió mi casa y todo para allá arriba (...) Me siento responsable de la vida de mucha gente. Si yo no hubiese hecho esta toma, esa gente habría muerto en otro lado y aquí murieron 53 personas", declaró.
"Somos gente de trabajo, no somos de grandes recursos. Vivimos de una jubilación, de un sueldo bajo, y ahora, partir de nuevo, con 75 años que tengo...", le dijo al periodista Roberto Saa.
"He sobrevivido a muchas tragedias"
Junto con comentar que su hija y su yerno viven cerca de él, también siendo afectados por las llamas, Luis mencionó que, laboralmente, "siempre he sido una persona multifacética, he hecho de todo. He sobrevivido a muchas tragedias, ya me han tocado tres en esta vida", siendo una el exilio durante la dictadura militar.
"Perdí todo en esa ocasión (...) perdí a mi señora, a mi mamá, fue duro. Yo no tengo ninguna ayuda del Gobierno, soy retornado político y no tengo ninguna ayuda, nada. Tengo una jubilación de $190.000, nada (...) Lo único por lo que estoy es que tengo vida", afirmó.
Yáñez perdió todo lo que le generaba ingresos, desde herramientas, su vehículo, documentos y hasta su ropa: "Quedé con lo puesto, teniendo mucha buena ropa, se quemó todo. Me corté los dedos sacando la lata, pero aquí estamos".
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