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Minutos de furia en Maullín: Hombre amenazó con un hacha a Bomberos por cargar combustible antes que él

Minutos de furia vivió un automovilista que amenazó con un hacha en mano a voluntarios de Bomberos y trabajadores de una estación de servicio en la comuna de Maullín, en la región de Los Lagos.

La situación ocurrió el pasado miércoles 24 de enero y se habría generado por la molestia que le provocó que los empleados de la bomba le dieran prioridad —por sobre él— a los carros de la institución que apaga incendios y atiende otros siniestros.

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Minutos de furia y terror

Según se aprecia, lo ocurrido fue grabado por uno de los voluntarios que estaban al interior del carro. De hecho, no descendieron de la maquinaria bomberil, porque el sujeto les advirtió que si lo hacían los iba a agredir con el hacha.

El comandante de Bomberos de Maullín, Ringo Mansilla, detalló a Radio Bío Bío que el voluntariado venía de una festividad que se realizó en la localidad de Carelmapu, a propósito del aniversario de la Tercera Compañía.

 

Carabineros logró detener al conductor que amenazó con un hacha a Bomberos (X)

 

Fue así que los vehículos de la Segunda y Cuarta Compañía pasaron a recargar combustible en la estación. En ese contexto, "los vehículos de emergencia siempre tienen la prioridad para hacer la recarga y tenerlos listos en caso de algún incidente", explicó.

Cuando llegaron, "una persona se acercó de manera agresiva a uno de los móviles, increpando a los Bomberos porque habían ocupado el lugar de la recarga, diciendo que a él le correspondía realizarla".

"Los voluntarios le explicaron que son vehículos de emergencia y deben estar listos por cualquier evento", comentó Mansilla, pero aquel argumento de nada sirvió, porque "el individuo se alteró, se acercó a su vehículo y retiró un hacha con el cual quiso agredir a bomberos de nuestra compañía", agregó.

Carabineros llegó a socorrer a los Bomberos

En medio de la tensión y el miedo por lo que podía hacer el ofuscado chofer, una patrulla de Carabineros llegó al lugar para controlar lo que ocurría.

Uno de los policías, incluso, desenfundó su arma de servicio en caso de que el hombre atacara a alguno de los presentes. "¡Suéltalo!", le gritó para que se desprendiera del hacha. 

Finalmente, Carabineros logró someter al furioso conductor, deteniéndolo para dejarlo a disposición de los órganos de justicia de la región sureña.

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