Desaparición de Alison Muñoz: Habría ido a cobrar un finiquito y luego se le perdió el rastro en Concepción
¿Qué pasó?
Sin novedades continúa la búsqueda de Alison Muñoz Cuadra, una mujer de 28 años que desapareció el pasado viernes 12 de enero tras salir de su casa a hacer un trámite a la Inspección del Trabajo, mientras que luego iría a cobrar un finiquito en Concepción, en la región del Biobío.
A eso de las 10:00 horas de ese día, la joven tomó un auto mediante una aplicación de transporte desde la población Los Lagos de Chile, ubicada en el sector de Collao, en direción al centro de Concepción, que queda a unos cinco kilómetros de esa zona.
Alison no contesta llamadas ni mensajes
Según explicó su familia, cuando eran las 12:00 horas comenzaron a preocuparse, ya que le escribieron para saber cómo le había ido en sus trámites, pero Alison no contestó las llamadas ni mensajes. De hecho, al marcar su celular se escuchaba una grabación que señalaba "este número no tiene teléfono".
En esa línea, los cercanos a la joven presentaron una denuncia por presunta desgracia en Carabineros, y el pasado lunes la Fiscalía instruyó que el caso sea tomado por la Policía de Investigaciones (PDI).
Durante este miércoles, tanto la madre como el padre de la mujer se reunieron con la PDI porque creen que fue secuestrada, ya que ella nunca perdía el contacto con su familia, pues tiene un hijo de 11 años.
Al momento de su desaparición, Alison vestía una polera y pantalón rosado, además de un blazer y zapatillas negras.
¿Qué dijo la familia de Alison por su desaparición?
María Paz Muñoz, hermana de Alison, señaló que ella "salió en una aplicación de auto hacia el centro de Concepción, se suponía que iba a la Inspección del Trabajo. Ahí le perdimos el rastro".
"A las 12 del día ya se hizo la denuncia porque Alison es una persona que siempre se ha mantenido conectada (...) así como no contestar eso no lo hacía", sumó.
María Paz sostuvo que en su familia "nosotros creemos que alguien la puede tener, porque es muy difícil que ella haya desaparecido en la forma en que lo hizo, menos dejar a su hijo".
Ariela Muñoz, otra de las hermanas de Alison, aseveró que a ella "le gustaba estar en su casa, con su familia, con su hijo, con nosotras sus hermanas (...) se llevaba bien con todos. Era una persona alegre, simpática, amable, ayudaba a la gente que podía ayudar".
"Uno la llamaba y siempre te contestaba, pero después ya no contestó. Para nosotros fue extraño porque ella siempre andaba con su celular".
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