El "hongo de la muerte": Esta es la especie que consumió joven que murió en el Biobío
- Por Julieta Garagay
¿Qué pasó?
Un joven de 17 años falleció la madrugada de este lunes 19 de junio, tras ingerir hongos silvestres que recolectó junto a su familia en la comuna de Hualqui, región del Biobío.
El adolescente sufrió una falla hepática fulminante debido al veneno del hongo llamado Amanita phalloides, también conocido como "hongo de la muerte".
¿Cómo es el "hongo de la muerte"?
De acuerdo al sitio lacasadelassetas.com, la Amanita Phalloides pertenece a la familia Amanitaceae, subclase Agaricomycetes, orden Agaricales, clase Basidiomycotina.
En cuanto a su morfología, esta tiene un "sombrero" cuyo diámetro alcanza entre los 5 y 15 centímetros. En ejemplares jóvenes posee una forma subglobosa y evoluciona hacia una forma plana en la madurez.
Es de tono verdoso amarillento, oscureciéndose levemente en el centro. Su base tiene entre 6 y 15 centímetros de largo y entre 1 y 2 centímetros de diámetro, es cilíndrica y se va ensanchando poco a poco hacia su base. Además, la carne es suave y tiene un aroma agradable.
¿Cuáles son los síntomas al comerlo?
Según un estudio del Centro Nacional de Intoxicaciones del Hospital Profesor Alejandro Posadas (Argentina), luego del consumo de la Amanita phalloide existe un período asintomático que varía entre 6 a 24 horas.
Luego, su acción se divide en tres fases: gastrointestinal, mejoría aparente y hepato-renal. En la primera aparecen las "náuseas, dolor abdominal, vómitos y diarrea profusa, a veces mucosanguinolenta, que pueden conducir a deshidratación y shock con alteraciones hidroelectrolíticas".
La fase gastrointestinal dura entre 12 a 36 horas. Después viene la fase de mejoría aparente, que dura entre 12 a 24 horas, y el paciente se encuentra asintomático, aunque ya se detecta aumento de enzimas hepáticas.
Por último está la fase hepato-renal, que comienza 2 a 4 días después de la ingesta. Aquí, según el estudio médico, "aparecen signos y síntomas de hepatotoxicidad que pueden evolucionar a insuficiencia hepática (...) deterioro renal por toxicidad directa o secundario a deshidratación".
"Sin tratamiento oportuno, el paciente fallece por insuficiencia hepatorrenal. En algunos casos se observó una evolución a hepatitis crónica por inmunocomplejos. En la anatomía patológica se describe necrosis centrolobulillar y degeneración grasa del hígado", aseveraron los investigadores argentinos.
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