Hombre desarrolló una grave enfermedad por su trabajo y ahora deberán indemnizarlo con $40 millones
- Por Diego Alonzo
¿Qué pasó?
La Corte Suprema confirmó el miércoles 12 de octubre un fallo que ordenó indemnizar a un hombre, buzo mariscador, que desarrolló una grave enfermedad mientras trabajaba, por lo que ahora recibirá $40 millones.
El fallo unánime
La Cuarta Sala del máximo tribunal, en un fallo unánime, declaró inadmisible un recurso de unificación de jurisprudencia que se había interpuesto en contra de la respectiva demanda.
Por lo tanto, dos empresas tendrán que indemnizar al hombre por concepto de daño moral, informa el Poder Judicial.
"Era una persona activa, alegre y sana"
Según el fallo de primera instancia, este episodio afectó a un hombre de 47 años que reside en la comuna de Penco, ubicada en la provincia de Concepción.
El respectivo documento indica que el trabajador "contaba con plena capacidad laboral y, hasta antes de la enfermedad profesional que le aqueja, era una persona activa, alegre y sana, que tenía plena autonomía e independencia para realizar sus quehaceres diarios".
El caso
El hombre cumplía con su labor de buzo mariscador básico y tenía como restricción no bajar más allá de una profundidad de 20 metros. Sin embargo, el documento reveló que, pese a no estar autorizado, su empleador, en ciertas ocasiones, lo obligaba a bajar aún más.
Esta labor debía ser realizada por los buzos comerciales, pero muchos de ellos habían sido despedidos, por lo que su superior ordenó que los buzos básicos, como el hombre de 47 años, hicieran aquellos trabajos, con la amenaza de ser despedidos si se rehusaban.
"El trabajo era pesado, consistía en bajar cuando la red del barco en la faena se estaba rompiendo para evitar que esto sucediera y la pesca no se perdiera. (El afectado) pasaba mucho tiempo en el mar sin tener un control o medidas de protección necesarias. La mandante no exigía a la empresa principal hacer cumplir las medidas de seguridad ni vigilaba las frecuencias de las inmersiones", se mencionó en el texto.
A partir de allí, el trabajador desarrolló la enfermedad de Necrosis Avascular de Cabeza Humeral, la cual fue diagnosticada por el Compín en agosto del 2017: "Entró sano a la empresa y se fue enfermo producto de la actividad que realizaba", se agregó en el fallo de primera instancia.
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