Estudio indica que venezolanos residentes casi no se emparejan ni forman familia con chilenos
- Por Vladimir Núñez
¿Qué pasó?
Un estudio elaborado por el Laboratorio de Encuestas y Análisis Sociales (Leas) de la Universidad Adolfo Ibáñez, a base de encuestas, reveló los bajos porcentajes respecto a los migrantes en nuestro territorio que deciden emparejarse y/o formar una familia con chilenas y chilenos.
¿Qué dice el estudio?
Para su realización, se encuestó a 1.427 personas, de 18 o más años, que hayan nacido en Venezuela, Perú, Haití, Colombia o Bolivia, y que cuenten con 1 año o más de residencia en Chile.
Entre los datos que arrojó, se logró determinar que solamente el 13% de los venezolanos y venezolanas que viven en nuestro país, se ha casado o formado una familia con un chileno o chilena. Siendo las personas de esta nacionalidad las que poseían una menor preferencia por formar familia con chilenos, de entre los cinco países que conformaron el estudio.
Algo similar ocurre en el caso de los encuestados con otras nacionalidades, registrando que en el caso de los haitianos/as, solo el 23% ha decidido emparejarse con un chileno/a; los colombianos/as lo han hecho en un 22%; los bolivianos/as en un 17%; y los peruanos en un 31%.
¿Por qué los venezolanos casi no se emparejan con chilenos?
Esto es explicado por Enny Ascanio, una migrante venezolana en nuestro país que se casó con un joven chileno, quien en conversación con LUN dijo creer que "una de las razones sobre por qué los venezolanos no nos emparejamos tanto con chilenos tiene que ver con la red de contactos al llegar al país, eso influye. Día a día uno está con personas de la misma nacionalidad para sentirse en casa".
Asimismo, el investigador del Leas, Andrés Scherman, apoyó esta idea y señaló al medio citado que cuando los migrantes llegan a un nuevo país, suelen instalarse en barrios donde habitan personas de su misma nacionalidad, con la finalidad de construir sus redes. "Es una red de colaboración. Ocurre con las migraciones, sobre todo en América Latina, en Europa no es tan así. Uno vuelve a reconstruir sus redes para que el desarraigo no sea tan fuerte", sostuvo.
Finalmente, Alberto Rodríguez, venezolano que lleva quince años viviendo en nuestro país, detalló que, junto con lo descrito anteriormente, "existe una diferencia cultural importante y también de personalidad. Esas diferencias juegan un rol grande al momento de tener pareja. Por ejemplo, los venezolanos somos muy de piel y tenemos una distancia proxémica mucho más corta con las otras personas. Nos gusta estar cerca corporalmente. El chileno es más desconfiado, lejano e introvertido".