Joven de Quillota busca obtener su casa a través de trueques: Inició con un clip y ya tiene una bicicleta de $280 mil
Debido al escenario económico del país, actualmente muchos jóvenes ven con mayor dificultad poder alcanzar el sueño de la casa propia. Sin embargo, un estudiante de medicina de la Universidad de Valparaíso busca ser dueño de una vivienda de un modo que en los tiempos de hoy en día no es común ver.
Vicente Rojas Garrido, de 19 años, vive en la población O'Higgins de la comuna de Quillota y se puso como objetivo obtener su casa a través de una cadena de trueques.
La iniciativa la empezó con un clip para papel, objeto que se encuentra en muchas casas y almacenes y que su valor es de alrededor de $100.
Pese a la simpleza del clip, Vicente ha sabido llevar a cabo su campaña en redes sociales y ha logrado tener en su poder objetos como una cartera de lujo, joyas, una bicileta, entre otros.
¿Cómo surgió la idea?
De acuerdo a la cuenta de redes sociales "Trade me Project Chile", que ocupa el joven para difundir los trueques, se inspiró en un caso que vio en TikTok, sobre una mujer que consiguió tener una casa a través de una cadena de trueques, que comenzó con una horquilla.
Se trata de la estadounidense Demi Skipper, que a su vez se inspiró del caso de un hombre de Canadá.
"Esta persona (Demi Skipper) tras dos años de trueque, había logrado conseguir una casa. Esto había sucedido en Estados Unidos y yo dije, '¿Se habrá hecho antes en Chile?'", contó Vicente en El Observador.
"Podría yo ser la primera persona. ¿Por qué no empezar ofreciendo un clip de papel para trueque en redes sociales y ver cómo responde la comunidad?", recordó.
"Se lo dije como en broma a mi familia y mi papá se rió, porque me dijo que cómo yo iba a llegar de un clip a una casa. Aún así dijo que me apoyaba, que lo hiciera si quería, pero que era como medio loco", señaló.
Fue así como el joven puso manos a la obra e hizo el primer video para redes sociales, y así difundir el trueque a través de las distintas plataformas de Internet.
De un peluche a una cartera de lujo
Su publicación en redes sociales dio resultado y se puso en contacto con Amparo, una estudiante de la Universidad de Valparaíso que le ofreció un osito de peluche, a cambio del clip.
Además de publicar el osito de peluche en Instagram y TikTok también lo hizo en Marketplace de Facebook.
"Si bien en TikTok difundo el proyecto, Facebook ha sido la herramienta para buscar gente que quiera hacer trueques, porque ahí está más concentrado", explicó.
"Ahí me contactó Magdalena, que es una chica de La Cruz. Ella me dijo 'Tengo una cartera, conozco tu proyecto, ya lo había visto antes y creo que esta (cartera) podría ayudarte mucho en aumentar el valor del trueque", relató Vicente.
"Yo no entendí a qué se refería, por qué me estaba diciendo eso, hasta que 'caché' que me estaba ofreciendo una cartera Gucci", añadió.
El quillotano señaló que "ella me dice que estaba donando sus cosas a un hogar de niñas y que no podía donar la cartera, entonces no sabía qué hacer y como ella 'cachaba' el proyecto, que yo quería conseguir una casa, me quiso pasar la cartera para aumentar el valor. Nos juntamos en La Cruz e hicimos el segundo trueque".
Pese a que este trueque se llevó a cabo hace unos meses, todavía hay personas que le preguntan por la cartera.
Joyas originales
Luego de un tiempo logró cambiar la cartera por aros, un cuya y un reloj.
Todo esto contaba con certificados que acreditaban su autenticidad. De todos modos, el joven se dirigió a la tienda para confirmar si eran originales.
"La trabajadora de la joyería dijo: 'Mira, la verdad es que estos códigos (de los certificados) no parecen ser de nosotros", recordó Vicente.
Sin embargo, la joyera ingresó los códigos y después de unos minutos concluyó que sí eran originales, sólo que los sellos eran antiguos.
Último trueque
El estudiante de medicina ofreció todas las joyas juntas, para así no alterar la cadena de trueque, y a comienzos de julio concretó su más reciente intercambio.
"Por las joyas, me contactó Dorka. Ella me dijo que tenía una bicicleta, que era nueva y que la tenía guardada en una bodega. Dijo que me la podía pasar con un casco y con un chaleco reflectante", afirmó.
"Dorka me dijo que la pura bicicleta se estaba vendiendo a $280 mil pesos y ahí yo dije chuta, igual es alto el valor. La pensé un tiempo, porque igual una bicicleta es medio complejo de llegar y cambiar, hasta que le dije que me interesaba", agregó, indicando que estimaba que las joyas equivalían a $250 mil.
Fue así que se juntaron en Viña del mar y concretaron el trueque de la bicicleta que es aro 29, con frenos de disco y de 21 velocidades (7x3). Además, incluye un chaleco reflectante, un casco y una cadena con código. Actualmente, todo esto está disponible para un intercambio.
¿Cómo define los trueques?
Vicente detalló que cuando le ofrecen un producto siempre espera más tiempo para ver si le ofrecen algo más valioso. Eso ocurrió en el segundo trueque, cuando en primera instancia le habían ofrecido un oso de peluche más grande al que ya tenía, y terminó con una cartera de lujo.
Además, explicó que se fija "tanto en el valor (del objeto) como en qué tan útil podría llegar a ser para otra persona".
"Antes de ofrecerme las joyas, me habían ofrecido unos gramos de oro, pero el oro no estaba trabajado. Era algo bien valioso pero es complejo que alguien quiera aceptarlo propiamente tal", comentó.
"He rechazado relojes, que al parecer eran caros, pero no tenían boleta, o yo no sabía sobre su procedencia. Sinceramente me daba miedo que hasta pudieran ser robados, así que preferí no arriesgarme", afirmó.
También contó que le ofrecieron un rifle a cambio de la bicicleta. "Yo le dije: 'Sabes, la verdad es que las armas no es un mundo en el que yo me maneje'. Prefiero no meterme en eso, porque después puede ser muy complicado para volver a hacer un cambio".
¿Cuáles son sus planes para la casa?
Al ser consultado sobre qué hará una vez que obtenga la vivienda o si está pensando someterla a trueque, respondió: "Esa es una muy buena pregunta", y afirmó que es algo en lo que ha estado pensado desde que le pidió ayuda a un influencer.
"Él me dijo:' ¿Cuál es tu fin social?' Ahí me sentí al principio un poco atacado, porque me dijo: 'Si no tiene un fin social, entonces no me interesa'", relató.
"Por el momento, aún no lo tengo claro. Aún no puedo decir: 'Sabes, yo cuando tenga la casa, la voy a rifar, o me la voy a quedar, o la voy a intercambiar por otra cosa'", expresó.
"Lo veo todavía como un poco lejos y por eso aún no puedo decir lo que haré con la casa una vez que la tenga", dijo.
Traer de vuelta el trueque
De todos modos, el joven manifestó: "lo que sí tengo claro, cuando empecé todo esto, es que yo creo que puedo motivar y volver a traer el trueque a la comunidad. Es algo quizás está un poco perdido y quizás está desvalorizado, pero sigue importante. Es algo que todos podemos hacer y dedicándole un poco de tiempo, quizás no siempre aumentar el valor, pero si yo tengo algo que no uso y lo tengo guardado, puedo cambiárselo a alguien más sin que haya dinero de por medio".
"Ése es mi primer fin. Y cuando la gente me preguntó que cómo podía hacer el mismo proyecto y el ver que otra gente comenzó en otras partes a hacer exactamente lo mismo; ahí ya me di por pagado. Hay gente que me ha dicho que ésta es una tradición muy linda que se hacía antes y ahora no, me gustaría traerla de vuelta", agregó Vicente.
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