Auxiliar de aseo sufrió un preinfarto, lo echaron tras acusarlo de faltar al trabajo y ahora le pagarán varios millones
Un adulto mayor que fue despedido por, supuestamente, faltar a su trabajo como auxiliar de aseo en enero de 2021, recibirá una indemnización millonaria luego de que el Segundo Juzgado de Letras de Santiago declarara esta acción como "indebida".
El despido
De acuerdo al fallo en Primera Instancia, todo comenzó en octubre de 2020 cuando, Francisco Calfuqueo, empleado de Hospital Housekeeping Systems Chile SpA y que prestaba servicio en la Red Salud UC-Christus, sufrió un preinfarto que lo tuvo con licencia médica hasta el 31 de diciembre de ese año.
Antes de terminar el año, la demanda dice que el hombre recibió una llamada de su empleador en la que le indicaban que por su edad, 81 años en ese entonces, además de su situación de salud y el contexto de pandemia, no regresara a su trabajo hasta que las condiciones sanitarias lo permitieran.
Fue así como el día 4 de enero de 2021, Calfuqueo asegura que llamó para saber si debía firmar algún documento por el beneficio y si seguiría recibiendo su sueldo. La empresa le habría dicho que no se le pagaría por no prestar servicios, lo que calificó de injusto. Tras esto, según él, le dijeron que estaba despedido por "mal agradecido" y que lo llamarían para que firmara su finiquito.
Tras no recibir esa llamada, el adulto mayor puso una constancia en la Comisaría Virtual el día 8 de enero de 2021, enterándose posteriormente que la empresa lo había despedido con fecha 7 de enero de 2021 por no presentarse a trabajar entre los días 1 y 5 de ese mismo mes.
Millonaria indemnización
Durante el juicio no se pudo comprobar que el despido de Calfuqueo se haya producido de manera telefónica, además generó dudas que la constancia en Carabineros se haya producido cuatro días después de este supuesto despido verbal.
Sin embargo, el tribunal señala que es el empleador quien en un juicio por despido debe "acreditar que la causal alegada se encuentra debidamente justificada". Para cumplir con este requerimiento, la empresa entregó un documento denominado "Control de Asistencia", el cual "era impreciso y con parcialidades", además de no cumplir con las características que autoriza la Dirección del Trabajo en cuando a control horario.
Además, una de las testigos del empleador era la Gerenta de Recursos Humanos, quien cuando ocurrieron los hechos estaba de vacaciones, "por lo que de mala manera puede entregar una declaración concluyente a este respecto".
"En consecuencia, en la ausencia del único medio probatorio válido para acreditar la causal aplicada, el despido necesariamente deberá ser declarado como injustificado", decretó el tribunal.
Con esto, Francisco Calfuqueo deberá recibir: $449.750 por indemnización sustitutiva del aviso previo; $2.248.750 por 5 años de servicio; $1.799.000 por incremento legal del 80% contemplado en el artículo 168 letras c) del Código del Trabajo; y $37.603 por feriado proporcional. O sea, un total de $4.535.103.
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