Proyecto busca sancionar penalmente el acoso sexual: Conoce los alcances de la iniciativa
La próxima semana se votará en el Congreso el proyecto que busca sancionar penalmente el acoso sexual.
Por lo mismo, este sábado la senadora Ximena Órdenes, y la neurocientífica y vicepresidenta de la red de investigadoras, Vania Figueroa, hablaron con Rodrigo Sepúlveda en Meganoticias Alerta.
Pese a que el proyecto se centra en el ámbito académico, también incluye lo que sucede en el mundo laboral, del deporte y hasta las instituciones castrenses.
¿Qué dijo la senadora Órdenes?
“El acoso sexual es visto en el ambiente laboral, pero no en lo educacional o en otros ámbitos, como los espacios deportivos, militar, la salud, y hasta funciones públicas”, dijo para comenzar.
Consultada por qué se entiende por acoso, expuso que “el espectro es bien amplio. Un ejemplo puede ser favores de naturaleza sexual a cambio de aumento de salarios, trabajos o promesas de mejoramiento laboral”.
Añadió que “el proyecto establece acoso sexual como delito, pero ahora parte en el ámbito académico. Esto puede llegar a tener una pena de reclusión menor en su grado mínimo”.
La parlamentaria, finalmente, sentenció que “al hablar de género es un concepto relacional. El proyecto reconoce a hombres y mujeres como posibles víctimas de acoso, pero las cifras hablan por sí solas sobre la gran cantidad de mujeres que padecen esto”.
“Nadie puede vivir en espacio de violencia”
Por su parte, la neurocientífica Vania Figueroa sentenció que “tuvimos muchas denuncias con respecto al acoso y detectamos un vacío legal. Por ejemplo, en las estudiantes universitarias... La primera puerta que golpeamos fue la de senadora Órdenes y luego se sumaron más parlamentarios”.
Agregó que “el proyecto busca garantizar que los espacios académicos estén libres de violencia y vulneración, en este caso las mujeres”.
La vicepresidenta de la red de investigadoras también dio un concepto de lo que es el acoso.
“El proyecto define acoso como una conducta de naturaleza sexual, no consentida por la persona que la recibe, y que crea un entorno intimidatorio. Esto puede ser de forma aislada o reiterada”, expresó.
También expuso que, por ahora, “el proceso solo norma espacios académicos... Hay una suerte de mayor recepción de las instituciones de acoger estas denuncias. Igual estamos en situación de precariedad ante el poder. Queremos que las instituciones de educación superior tengan profesionales para ver estos casos y ayudar a las víctimas”.
Para cerrar y al igual que la senadora, dijo que “el proyecto no deja afuera a los hombres y las diversidades. Nadie puede vivir en espacio de violencia”.
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