La historia de la profesora argentina que llegó a Chile llena de sueños y murió en trágico hecho
¿Qué pasó?
Tras dos semanas de una larga agonía falleció Lucía Alejandra Walter, joven profesora de 33 años, oriunda de Salta, Argentina, quien permanecía internada tras sufrir un grave accidente que le provocó terminar con la mitad de su cuerpo completamente quemado en la ciudad de Calama, región de Antofagasta.
El hecho generó una verdadera tragedia familiar, ya que sus padres no pudieron viajar a Chile para acompañar a la mujer, a lo que se sumó que su hijo quedó a la deriva en la nortina localidad y debió ser repatriado.
"Fue una tragedia horrorosa"
Lo ocurrido con la profesora de artes plásticas sigue en investigación tras terminar con su cuerpo calcinado producto de la explosion de recipientes con un líquido inflamable, que aparentemente utilizaba para la limpieza de pisos.
"Fue una tragedia horrorosa. Se quedó sin rostro, sin pechos. Fue horrible",afirmó su madre, Gabriela Ortiz, en declaraciones al diario El Tribuno.
Tras el accidente la mujer fue hospitalizada de urgencia en el Hospital de Antofagasta para luego ser trasladada a Santiago, producto de las graves heridas, todo en solitario, ya que su familia no pudo ingresar a Chile debido al coronavirus.
"Lo peor es que no pude consolarla, acompañarla por la maldita pandemia. Ahora nos encontramos todos juntos en Salta rezando, sin saber qué hacer. Nos resta seguir esperando", agregó su progenitora.
“No hubo forma, buscamos por todos lados pero a todos los trámites normales se sumaba el aislamiento obligatorio. El consulado gestionó que la trasladaran a Santiago. Llamábamos todos los días al hospital para recibir los partes médicos. Fue una pesadilla”, recordó su madre.
Hijo de la profesora quedó varado en Antofagasta
Junto al calvario por el estado grave de la mujer, se sumó que su hijo pequeño quedó varado en Antofagasta por lo que desde Argentina debieron repatriarlo.
Así el padre de Lucía consiguió viajar en un avión de la provincia de Salta en un vuelo exprés.
"Fue y volvió, apenas llegó al aeropuerto y estaba mi nietito. Así que pegaron la vuelta de inmediato. No sabemos cómo vamos a afrontar todo esto. Es muy doloroso, mi nieto sufre de asperger", detalló la mujer.
La situación provocó el dolor de su familia, ya que Lucía había viajado en enero pasado a radicarse en Chile en busca de nuevas oportunidades.
"Ya había montado su estudio en Calama. Amaba el arte, la música. Era una soñadora. No tuve la posibilidad de darle un beso en la frente, de despedirme. Hoy tengo las manos vacías", sentenció la madre.