Siguen los atochamientos y las demoras en Compin
El Compin sigue siendo una bomba de tiempo. La oficina de la calle Moneda en Santiago continúa llena de personas esperando una respuesta. Alegan que los pagos de sus licencias llevan retrasos de meses y aunque ya han recibido el dinero de los permisos más recientes, aún tienen licencias anteriores impagas.
El gobierno se comprometió a tener todas las licencias al día el 31 de agosto, además, implementó una plataforma para que los usuarios sigan el curso de sus trámites on line. Sin embargo, los afectados se quejan que la página es confusa y poco amigable.
Las quejas de los usuarios son por la falta de personal y de la documentación necesaria para acceder a los pagos.
La crisis en la atención del Compin explotó luego que dos usuarios protestaron violentamente por la excesiva demora en el pago de sus permisos de salud. Son cientos los usuarios, con enfermedades acreditadas, que han debido vivir durante meses sin recursos para sus necesidades.
El ejecutivo anunció una completa modernización del sistema de licencias. Una queja recurrente es la burocracia que hace que una licencia rechazada o modificada por el Compin, deba ser apelada en la Superintendencia de Salud que de nuevo los deriva al Compin.
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