Bermúdez: "La Contraloría no puede ser una especie de zar o capo anticorrupción"
El pasado miércoles se realizó la cuenta anual de la Contraloría General de la República, instancia en que el contralor Jorge Bermúdez solicitó que la institución tenga más atribuciones para conocer los movimientos de las cuentas corrientes de los organismos públicos.
En la oportunidad el contralor destacó que gracias a las 10.080 fiscalizaciones y 627 auditorías realizadas en 2017 se lograron restituir al fisco más de $2.800 millones sin necesidad de iniciar procesos sancionatorios.
Pese a que aumentó el número de auditorías realizadas por el ente fiscalizador, Bermúdez cree que es no es bueno que se aumente el número de funcionarios de la institución comentando que “No es deseable, en realidad, una especie de Leviatán de control”.
Muy por el contrario el contralor considera que “Es necesario contar con las mejores capacidades humanas y técnicas que permitan que cada entidad, incluyendo la Contraloría forme parte de un verdadero sistema de integridad del Estado, y en dicho sistema la Contraloría tiene un rol que cumplir, pero no ser una especie de zar o capo anticorrupción”.
En relación a la fiscalización, el contralor cree que no deben existir órganos exentos de control, haciendo una autocrítica al poco control que en el pasado tuvo el órgano de las empresas públicas como Codelco.
En relación a las Fuerzas Armadas y de orden, comentó que se realizaron durante el 2017 se realizaron 29 auditorías a las FF.AA. y 12 a Carabineros y la PDI y “el balance de esas auditorías no es bueno”.
Asimismo realizó un llamado a las instituciones castrenses a “recuperar la confianza de la ciudadanía” y modificar ciertas prácticas administrativas que son parte de la cultura de las instituciones y que “no coinciden con los estándares de integridad que reclama la sociedad. No basta con el cumplimiento de la legalidad formal, sino que se les exige un estándar superior porque debe ser un referente para toda la sociedad”.
En relación al ejecutivo, solicitó que en la discusión que se lleva en el Congreso de la reforma a la Ley de Bancos se incorpore una indicación que le permita el acceso al contralor al movimiento de cuentas y saldos de cuentas de órganos del estado.
