"No quiero que lloren mi caída, quiero se indignen por ella": Muere joven de 21 años que no pudo tratarse una leucemia en Chile
"No quiero que lloren mi caída, quiero que se indignen por ella. Que se enerven con cada injusticia que presencien y en cada puño en alto, y en cada voz alzada, estaré luchando", se lee en el lienzo que la familia de Joaquín Figueroa, el joven de 21 años que murió este domingo, a causa de una leucemia que no pudo tratarse en Chile, puso en su funeral.
Joaquín estaba consiguiendo los medios para viajar a Cuba para someterse a un trasplante de médula por una leucemia linfoblástica aguda que le había sido diagnosticada en 2015. En ese momento, se sometió a una quimioterapia sin resultados y, en septiembre de 2016, le realizaron un trasplante a través del AUGE. Había respondido bien al procedimiento hasta que, hace dos semanas, tuvo una recaída y lo hospitalizaron.
El cáncer había vuelto en un 83% a su cuerpo y en Chile, la respuesta de los médicos, fue que no tenían una propuesta de curación para la enfermedad. Que ya no podían entregarle nada para sanarse, sólo una alternativa paleativa: no era posible someterlo a un segundo trasplante de médula.
Hace una semana, Joaquín había dicho a AhoraNoticias.cl: "En otros países te pueden hacer otros tres trasplantes de médula y acá en Chile solamente está la oportunidad de hacerte uno. Y si no te resulta, te dejan botado".
Para lograr el viaje, había comenzado una campaña para juntar recursos que, finalmente, se vio frustrada.