Cadena de hamburguesas en quiebra suma nuevo dolor de cabeza: ¿Qué pasará con sus sucursales?
Semanas después de que se hicieran públicos sus problemas financieros, una conocida cadena de hamburguesas en Estados Unidos se declaró en quiebra por las millonarias deudas que la afectan.
Se trata de BurgerFi, empresa que aseguró estar en bancarrota en septiembre de este año, con pasivos que serían superiores a los 100 millones de dólares (cerca de 97 mil millones de pesos chilenos, según el cambio actual).
En agosto, cuando se reveló su crisis económica, se pronosticaba que sus pérdidas eran de 18 millones de la divisa norteamericana ($17,4 mil millones), cifra que ha intentado recuperar mediante una urgente decisión.
¿Por qué quebró la cadena de hamburguesas?
La prensa internacional consigna que uno de los principales factores que explican el mal momento financiero de BurgerFi consiste en uno que ha afectado a varias empresas, independiente del rubro que ejercen: la pandemia del coronavirus.
El covid-19 golpeó a la cadena de hamburguesas en varios sentidos, desde cambios en el comportamiento de consumo —originados en tiempos de confinamiento, cuando se prefería cocinar en casa en vez de pedir comida preparada—, hasta exigencias crediticias más duras.
Sumado a lo anterior, el precio de los insumos se disparó por efecto de la inflación norteamericana y mundial; y sus gastos fijos también incrementaron. Por ejemplo, para retener a sus actuales trabajadores y captar a nuevos, la empresa mejoró sus beneficios y aumentó sus salarios, presionando sus márgenes de ganancia.
El nuevo dolor de cabeza de BurgerFi
En 2015, la cadena firmó una alianza con la familia Lia y Angelo Mazzone —conocidos en los sectores financieros y gastronómicos, respectivamente— para abrir dos sucursales en Nueva York. Sin embargo, tras la declaración en quiebra de la empresa culinaria, los Lia decidieron no seguir en el acuerdo con BurgerFi.
Esta determinación se tradujo en que los dos locales en Nueva York, de propiedad de los Lia y situados en Latham y Saratoga Springs, dejaran de funcionar a partir del 1 de diciembre.
"Aunque nos despedimos de BurgerFi, esperamos explorar nuevas posibilidades para estas dos grandes ubicaciones", expresó la familia en un comunicado, que ahora está buscando nuevos arrendatarios para sus propiedades.
Pese a lo anterior, la compañía había asegurado que su quiebra no afectaría las operaciones de sus sucursales y de sus franquicias, lo que dependerá de cómo se desarrolle la crisis económica que enfrenta.
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