Rechazaron su recurso de queja: Nahir Galarza seguirá cumpliendo cadena perpetua por el asesinato de su novio
- Por Diego Alonzo
¿Qué pasó?
La justicia argentina rechazó esta semana un recurso de queja que había sido presentado por la defensa de Nahir Galarza, lo que quiere decir que la joven seguirá cumpliendo la pena de cadena perpetua por el asesinato de su novio, Fernando Pastorizzo, en diciembre del 2017.
El rechazo del recurso de queja
Según lo informado por Perfil, fue la Corte Suprema del país trasandino la que decidió desestimar este último recurso, así que la joven, ya sin más chances, deberá cumplir la cadena perpetua.
En julio pasado, los asesores de Galarza solicitaron la reposición del veredicto de la Corte y argumentaron que "en esa decisión existieron 'errores esenciales' en la apreciación de los antecedentes del caso y que, de no ser subsanados, se violentarían derechos constitucionales y convencionales".
El asesinato que provocó la cadena perpetua contra Nahir Galarza
El crimen ocurrió el 29 de diciembre del 2017, cuando Nahir Galarza y su novio Fernando Pastorizzo, que por ese entonces estaban pasando por una crisis en su relación, se reunieron en la casa de los padres de ella.
LO ÚLTIMO
Fue en la madrugada, a eso de las 05:00 horas, cuando la agresora le pidió que la llevara al domicilio de su abuela, aunque antes de hacerlo, y sin que él se percatara, tomó un arma de su padre, quien era expolicía.
Una vez que salieron al destino, unas cuadras más adelante, se produjo el primer disparo de la joven a su pareja, y unos segundos después vino el segundo tiro, lo que provocó que Pastorizzo cayera de la moto.
Galarza volvió a su vivienda, dejó el arma en el lugar donde estaba guardada y se fue a dormir. Al día siguiente la joven publicó en sus redes sociales un mensaje de despedida hacia su novio, dando a entender que ella no tenía nada que ver con su muerte, siendo que sí lo había asesinado.
La policía, que llegó a la escena del crimen, hizo las primeras diligencias y entrevistó a la joven, puesto que indicó haber visto a la víctima el día anterior. En ese momento, se volvió sospechosa principal y finalmente terminó confesando el asesinato, aunque en primera instancia recalcó que se trató de un "accidente".
Tras un juicio en su contra, Galarza fue sentenciada a la pena de cadena perpetua por el delito de homicidio agravado por el vínculo y el uso de arma de fuego.
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