Una amante, separación y división de bienes: La historia del asesinato de profesora enviada a matar por su exmarido
- Por Julieta Garagay
Un caso de femicidio, sucedido hace más de diez años y que horrorizó a Argentina, logró la condena del instigador del crimen, que también es el exmarido de la víctima y padre de sus dos hijos.
Claudio Sartal fue condenado por el Tribunal de Morón a cadena perpetua por el asesinato de la maestra de escuela Andrea Pajón, quien murió a tiros de dos sicarios el 27 de agosto de 2008.
La historia
Según la información de TN, Andrea Pajón decidió separarse de Claudio Sartal después de 22 años de matrimonio y dos hijos en común, cuando descubrió que este le había sido infiel.
Pero el hombre lo tomó mal. Pajón lo denunció 12 veces por violencia de género y amenazas. Intentó hacerlo una 13 vez, pero en la Comisaría de la Mujer no la tomaron y le dijeron que tenía que ir a la jurisdicción correspondiente.
La mujer no alcanzó a hacerlo, ya que el 27 de agosto de 2008, poco antes de las siete de la mañana, dos sicarios la balearon cuando salió de su casa en la ciudad de Castelar del país trasandino.
Andrea Pajón iba a subirse al auto con su hijo de 13 años para llevarlo al colegio cuando la asesinaron de dos balazos en la cabeza. Solo faltaban 15 días para la audiencia judicial que pondría punto final a su unión conyugal.
Dentro de las hipótesis más fuertes para los investigadores está el móvil económico del asesinato, ya que junto al divorcio se venía la inminente división de bienes de Sartal con su exmujer.
La condena
En julio de 2011, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 3 de Morón condenó de manera unánime a prisión perpetua a Sartal, al considerarlo instigador penalmente responsable del delito de “homicidio calificado por el vínculo y la participación de dos o más personas".
“La conducta de Sartal contra su expareja constituyó una afectación a la libertad para llevar adelante una vida normal. Un matrimonio desquiciado, la imposibilidad de mantener un diálogo, la obsesión a rajatabla, los reiterados anuncios de muerte y los términos usados para amedrentarla eran moneda corriente”, dijeron los jueces.
El abogado que defendió a Sartal, Marcelo Mazzeo, sostuvo que fue recién durante el juicio cuando dudó de su inocencia, y que lo que más me impactó fue "que hubiera producido la muerte de su esposa delante del hijo. No mostró ningún tipo de remordimiento, algún sentimiento, alguna empatía con la familia”.
Marta, la mamá de Andrea Pajón, añadió que “lo llamé a la cárcel y le dije: rezá mucho, ponete de rodillas para que yo me muera porque voy a ser tu cruz. Mientras viva voy a seguir hasta que haya justicia para mi hija”.
“Es terrible verlo por Facebook, ver que tiene Facebook en la cárcel. Está bien, tiene su televisión, su microondas… Y nosotros no tenemos nada, lo único que tenemos es el alma rota y angustia con mis nietos”, cerró.