Fue al médico pensando que tenía síntomas de menopausia pero se trataba de una extraña enfermedad
- Por Diego Alonzo
Eve Lauder, de 47 años y que trabaja como oficial de policía, se vio afectada por intensos dolores en la zona abdominal, llegando a pensar que eran síntomas de la menopausia. Sin embargo, al acudir al médico, se le informó que en realidad estaba equivocada.
Fue en 2020 cuando un especialista le notificó que tenía un carcinoma de células caliciformes avanzado, es decir, un tumor extraño que suele presentarse en el apéndice, informa Mirror.
Pero lo peor vino después, ya que los mismos profesionales le indicaron que se trataba de un cáncer terminal, por lo que tenía de 6 a 12 meses de vida, lo que la dejó totalmente atónita.
"Estaba en estado de shock"
Si bien los doctores le dijeron que no estaría viva para este año, Eve, quien es madre soltera de un joven de 23 años y abuela de un niño de 2, contra todo pronóstico, ha podido seguir disfrutando junto a su familia, aunque manteniendo los respectivos cuidados por su enfermedad.
La mujer, que vive en Somerset, al suroeste de Inglaterra, fue enfática en señalar que, en un comienzo, los médicos le comentaron que "no había mucho que pudieran hacer, ya que estaba en la etapa cuatro y que me quedaban entre seis y 12 meses de vida. Estaba en estado de shock".
La lista de deseos
En medio del proceso, Eve escribió una lista de deseos con el objetivo de realizar varias actividades que tenía en mente: "Había festivales a los que quería ir y lugares a los que nunca había ido. Siempre quise visitar Alemania, así que lo agregué a la lista", sostuvo.
"Desde que hice la lista, he estado en las Bahamas, Menorca y Mallorca. Fui a Glastonbury el mes pasado con un amigo y, a pesar de que durante el festival estuve en quimio, tomando ocho tabletas al día, tuve un increíble tiempo", manifestó.
La paciente, que continúa con su quimioterapia, remarcó que está enfocada en su futuro y mira la vida con optimismo. En este sentido, reveló que "existe la posibilidad de que surja un ensayo clínico para el que soy elegible. Esa sería la última esperanza de detener la progresión de mi cáncer. Pero ya superé el pronóstico que me dieron inicialmente y no planeo bajar el ritmo".
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