Hombre mató y quemó a su expareja: Colaboró con la investigación y luego confesó el macabro crimen
Una amiga posteó una foto en redes sociales y aquello fue suficiente para que se iniciara la investigación por la desaparición de Eugenia Olivera, una mujer de 37 años.
Específicamente en la ciudad de Andalgalá, Catamarca, Argentina, es que la mujer contó que hace días no sabía nada de su amiga y que aquello le preocupaba.
“Ella no usaba mucho su teléfono. Y sé que viajaba seguido a Belén porque había perdido su tarjeta de cobro. De un día para el otro no se la vio más, nos decían que estaba intubada en Capital. Después una amiga de Tucumán dijo que había viajado”, contó una amiga de Olivera en conversación con el diario El Ancasti.
Fue en julio que, a consecuencia de esto, se inició una búsqueda que culminó el pasado martes, cuando se realizó el macabro hallazgo de restos óseos quemados en un pozo, informó TN.
Expareja colaboró con la investigación
Eliseo Guerrero, expareja de la víctima y padre de sus tres hijos, fue consultado por este hecho, quien rápidamente comenzó con contradicciones.
El sujeto aseguró que ella "lo abandonó" cuando se fue de visita a Tucumán. Incluso declaró que la mujer estaba internada por coronavirus en un hospital de Buenos Aires, y que él mismo la había llevado hasta otra localidad llamada Belén.
La fiscal Soledad Rodríguez, a cargo de la causa, ordenó la inmediata detención del femicida, y a raíz de esto, el sujeto confesó el crimen y el lugar donde efectuó el crimen.
Relación conflictiva
Fue la misma amiga de la víctima que entregó detalles sobre la relación con el sujeto, quien señaló que el hombre tenía restricción de acercarse por hechos de violencia.
"Pese a que tenía restricciones de acercamiento, su ex no dejó de perseguirla y ella radicó varias denuncias más por esto. Cuando se separaron, él se hizo pasar por otra persona para seguirla. Y una vez se quiso ahorcar frente a los hijos", concluyó.