Las nuevas fiestas silenciosas con audífonos inalámbricos para evadir restricciones por Covid-19
Las fiestas silenciosas son un tipo de celebraciones que ya existían antes de la pandemia, pero su popularidad viene creciendo en los últimos tiempos, debido a que se convirtieron en la mejor forma de celebrar clandestinamente para evadir las restricciones contra el Covid-19.
Para no levantar la sospecha de los vecinos, los asistentes deben utilizar audífonos inalámbricos que están conectados por bluetooth al mezclador del DJ que coloca la música desde su cabina, informó La Vanguardia.
El origen de las fiestas de DJ se remonta a los años 60, cuando las personas se reunían espontáneamente en lugares poco frecuentados con el objetivo de bailar y escuchar música sin molestar a los vecinos evitando así cualquier tipo de problema legal. Luego, en los años 80, las fiestas se volvieron más comunes con el surgimiento de la cultura disco.
Sin embargo, las fiestas de música bailable llegaron a la cumbre de su popularidad en los años 90, en Estados Unidos, con la llegada de los festivales de música electrónica, que ayudaron a masificar este tipo de fiestas, reseñó Clarín.
Fiestas silenciosas son tendencia en el mundo
Actualmente, debido a las restricciones del Covid-19, las personas popularizaron estas fiestas nuevamente, pero bajo una modalidad silenciosa para evitar tener conflictos legales. Los asistentes utilizan la tecnología bluetooth para bailar con los auriculares mientras comparten bebidas y alimentos como en las fiestas comunes.
Andrés Schnayman, el dueño de la empresa Silent Sounds en Argentina, se encarga de organizar este tipo de fiestas silenciosas y llevó este tipo de reuniones a su ciudad.
“Vimos que era un producto que faltaba, que podía adaptarse a la noche de acá. Y que tiene una enorme cantidad de potencial”, dijo. “Podés escuchar en la misma pista a dos DJs en simultáneo, con una calidad excepcional y al volumen que elijas. En vez de usar sistemas de sonido con parlantes, la música es transmitida inalámbricamente a cada invitado”.
El emprendedor explicó que esta modalidad “también es una solución a las prohibiciones municipales, o la falta de habilitación que hay en Capital, por distintos motivos, entre ellos por el ruido”.
Las fiestas silenciosas no son un fenómeno exclusivo de un solo país. Desde Australia a Estados Unidos, hasta Canadá y Nueva Zelanda, ya existen empresas que se encargan de organizar este tipo de eventos en todo el mundo.
Leer más de