Cadena de favores le cambia la vida a padre que pedía limosna con su bebé de cinco meses
Un particular hecho se dio en Argentina, luego de que Ángel Ariel Ustares (34) encontrase trabajo en una multinacional de dicho país luego de haber estado casi un mes pidiendo limosna para alimentar a sus hijos.
Ángel, quien es mecánico y albañil, junto a su pareja Lara y sus hijos Bastián de apenas 5 meses y Catalina de 3 años, estuvieron obligados a pedir limosna y rogar por trabajo en la puerta de un banco. Y es que después de meses de su último trabajo en su oficio, pasó a vender pañuelos en la calle, lo que apenas le alcanzaba para sobrevivir.
Viéndose con problemas tan graves de dinero, como familia decidieron pedir dinero en el centro de Palermo. De igual forma, además de pedir una ayuda, también ofrecía su currículum vitae para hallar trabajo.
Tras unas semanas, bastó una publicación en redes sociales para que su vida cambiara para siempre.
Cadena de favores por redes sociales
Fue Sandra Tolosa, una mujer que pasaba por el lugar quien dio cuenta de la situación que vivía Ángel y su familia. Publicó una foto de él con su hijo en brazos y aquello bastó para conmover a los cibernautas.
“Ángel y su familia están en la calle. Vi su currículum junto al bebito de 5 meses y le pregunté que hacía. Llorando me contaba que es albañil y mecánico. No consigue trabajo”, señaló en la primera parte de la publicación.
Haciendo el llamado a ayudarlo, agregó que “quizás viralizando lo podamos ayudar. Me dijo que no quiere bajar los brazos por su hijo”.
Ofertas de ayuda en cosa de horas
La publicación fue compartida incluso por Linkedin por Agustina Lemucchi, una reclutadora IT de 25 años. Un hombre vio su historia y decidió ayudarlo, colocándose en contacto con ella.
“A los 15 minutos de mi posteo, me escribió un hombre que estaba dispuesto a ir a buscarlo y darle dinero. Viajó 40 minutos en moto y cuando llegó, me puso en contacto con Ángel”, señaló Lemucchi en conversación con Infobae.
Entre los aportes que recibió la familia fue una suma de dinero para realizar compras de alimentos, un teléfono celular para recibir las ofertas de trabajo e incluso la posibilidad de registrar a su hijo Bastián de apenas 5 meses, quien no estaba inscrito en el registro civil.
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