Llegó tarde y se fue temprano: Así fue la salida de Melania Trump de la Casa Blanca

Este miércoles 20 de enero se oficializó la salida de Donald Trump desde la Casa Blanca, lugar donde vivió durante los cuatro años de su mandato.

El ahora expresidente caminó por la alfombra roja y abordó un helicóptero acompañado por la primera dama poco después de las 08:15 hora local.

Aún la pareja no había abandonado el lugar, cuando The New York Time expuso que Melania Trump será recordada como la primera dama que llegó tarde a la Casa Blanca y se marchó temprano.

"Melania Knauss Trump asumió su papel de primera dama como un enigma. Nadie sabía cómo la exmodelo eslovena, que se convirtió en la tercera esposa de Donald Trump, se adaptaría al papel que su predecesora, Michelle Obama, había redefinido", sostuvo el medio.

Cuatro años de escándalos

Su papel como primera dama durante estos cuatro años resultó controvertido. A diferencia de otras, Melania Trump intentó seguir los pasos de sus predecesoras y llegó a Washington procedente de Nueva York meses después que el presidente.

Contrató personal, habló sobre el cuidado infantil en su calidad de madre de un hijo (Barron Trump), de 14 años de edad, y encontró causas que apoyar mientras que la atención que recibía solía ser por los atuendos de diseñador que llevaba en sus apariciones en público.

Durante el mandato de su esposo vivió momentos intensos, informes sobre la infidelidad, una afección renal que requirió una hospitalización y rumores nunca comprobados de que ni siquiera vivía en la Casa Blanca.

Nunca se acercó a Jill Biden

Pese al marcado distanciamiento que se notaba entre ambos, para las elecciones de 2020, Melania se unió a Donald Trump para insistir en que él realmente había ganado. Sin embargo, y de acuerdo a la prensa local, para Año Nuevo, la exmodelo estaba buscando una casa en Florida.

Por otra parte, y tras la derrota de sus esposo, nunca se acercó a la primera dama entrante, Jill Biden, sobre asuntos de transición, y no hizo ningún esfuerzo para darle un recorrido por la Casa Blanca, como es costumbre para las primeras damas que parten. En cambio, Melania dedicó su tiempo y se centró en empacar sus cosas desde ese lugar. 

"En el mejor de los casos es la primera dama reticente", afirmó el publicista R. Couri Hay y apuntó: "Francamente, creo que Estados Unidos solo debe dejarla ir".