Caso McCann: Revelan detalles de la vida en la cárcel del principal sospechoso del secuestro

Christian Brueckner, de 43 años de edad, es el principal sospechoso de la desaparición de la pequeña Madeleine McCann, a quien las autoridades alemanas dan por fallecida. Aunque el caso sigue en total investigación, el apuntado como autor del crimen se mantiene detenido en la prisión de Kiel, en Alemania, y solo se le permite salir de su celda una hora por día, y cuando lo hace, no puede tener contacto con otros presos.

A pesar de que Brueckner fue sentenciado a 21 meses, por otros cargos ilícitos, no relacionados con la familia McCann, el alemán se mantiene como sospechoso del caso y ha sido trasladado a una celda privada, para mantenerlo “a salvo” mientras dure la investigación del caso.

De acuerdo a lo publicado por The Mirror, el sospechoso pasa 23 horas al día en su celda y solo puede mantener contacto con los guardias de seguridad y un preso que le distribuye comida. Según el menú, los lunes son de estofado, los jueves de pescado y los domingos de asado.

Estantes, escritorio y televisión

En lo que respecta a la habitación, Christian Brueckner cuenta con una cama, un escritorio y una estantería que están pegados al suelo y cortinas frente a la ventana. A su vez, posee un televisor y sus estantes están llenos de documentos legales, donde reposan registros de los juicios y sus correspondencias.

Por ahora, el alemán deberá permanecer en la cárcel cumpliendo sus cargos, por vínculo de drogas y violación a una mujer de 72 años norteamericana. Sin embargo, de ser hallado culpable por el caso de Madeleine McCann, la fiscalía dictará una nueva sentencia correspondiente al delito.

Aunque la investigación sigue vigente, el abogado del acusado, Friedrich Fülscher, aseguró que su cliente "es inocente" y no tuvo nada que ver con el secuestro de la niña. Asimismo, reveló que Brueckner fue “víctima de un error judicial”.

Últimas investigaciones

Hasta la fecha, no hay suficientes pruebas contra el alemán en el caso McCann. Hace unas semanas, la policía alemana realizó excavaciones cerca del domicilio del hombre, en los alrededores de la ciudad de Hannover, donde encontró material comprometedor de otras menores de edad.