Participante del reality Gran Hermano tras abuso sexual: "Muchas personas trabajan allí ¡Y nadie hizo nada!"
¿Qué pasó?
"Hay muchas personas trabajando allí… ¡y nadie hizo nada!", afirmó Carlota Prado, participante de Reality español Gran Hermano, quien fue víctima de abuso sexual en la edición de año 2017 del programa.
El País, diario que tuvo acceso a los vídeos donde se muestra la declaración de los productores, señaló que la joven, de 25 años de edad, se veía afectada y, en oportunidades, sin aliento mientras narra cómo fue vulnerada por su compañero José María López, con quien mantenía una relación amorosa.
¿Qué protocolos tiene la productora?
De acuerdo al diario español, y según se muestra en los videos, la jueza del juzgado de Colmenar Viejo, Madrid, no solo interrogó a Carlota, también hizo lo propio con trabajadores de la productora del reality.
Es sí como, un día después del interrogatoria de la afectada, el 16 de noviembre de 2018, la autoridad escuchó el testimonio del director general de la productora del concurso de Telecinco, Zeppelin TV, Álvaro Díaz y de Florentino Abad, productor ejecutivo.
"La persona responsable (aquella noche) es María Robles", sostuvo Álvaro Díaz; mientras que Abad se defendió asegurando: "estaba en Zaragoza, no presencié los hechos en primera persona".
Después de escuchar a los principales hacedores del reality la jueza se preguntó: ¿qué protocolos tiene la productora, responsable de aislar a un puñado de personas durante meses en una casa? , a lo que Abad respondió: "nunca hemos llegado a ese extremo".
"Me la pusieron de niñera"
Evidentemente en la declaración Carlota deja entrever su indignación por el actuar de los productores y encargados de Gran Hermano, describió el diario. Entre otras tantas cosas, cada uno de los relatos demuestra la falta de protocolo y seguridad en el programa de televisión.
Una vez que ocurre el abuso sexual y luego que le mostraran a la joven el video donde se ve a José María sobre ella, la participante fue llevada a un hotel, bajo la vigilancia de María Robles.
"¡Me pusieron de niñera a la que se supone que me podía haber evitado todo! Yo no sé qué grado de inhumanidad tiene esta gente. Pero niñera, que yo iba al baño y la mujer se quedaba en la puerta", dijo Carlota, quien agregó: "me quitaba el mando (control) de la televisión y el teléfono, y tratándome como si yo estuviese pirada (loca) o fuese a cometer una locura".
Por otra parte, la joven confesó a la jueza lo siguiente: "no podía entender, por ejemplo, por qué estuvo tanto tiempo a mi lado, por qué no lo sacaron, por qué no se preocuparon de que yo me desmayé, por qué no me trataron, por qué no me metieron una B-12, tienen instalaciones más que de sobra. Yo he visto las instalaciones. ¡He visto la gente que está ahí en la salita con las pantallas y lo vieron todos como si fuese todo una puta película sin hacer nada!".