Más de 30 personas fueron mordidas por pirañas en Argentina
Como si se tratara de una película de ficción, unas 35 personas fueron atacadas por palometas brava, comúnmente conocidas como pirañas, en la Laguna de Setúbal, en Santa Fe, Argentina, el pasado 28 de diciembre.
Aunque el lugar no está habilitado para ser usado como balneario, la alta temperatura de ese día provocaron que los bañistas ingresaran a las aguas de la laguna, siendo atacados por este pez considerado como un feroz depredador carnívoro que se alimenta de diferentes animales marinos y pareciera que de carne humana también.
Según consignó la prensa local, la mayoría de los heridos resultaron ser menores de edad, hecho por el cual las autoridades de ese país hicieron un llamado a los adultos a bañarse con los pequeños mientras estén de paseo.
"Los mayores tienen que dar el ejemplo. Si saben que no pueden meterse al agua, no tienen que hacerlo sobre todo para que los chicos no los imiten, porque una palometa puede hacer más daño a un menor que a un adulto", afirmó Diego Palomeque, delegado del Sindicato de Guardavidas de Santa Fe.
Agua caliente igual a pirañas
Luego de terrorífico ataque, Palomeque explicó que la laguna de Setúbal no es apta para la recreación debido a la floración de organismos que son tóxicos para la salud del ser humano, así como por la presencia de este tipo de pirañas que se traducen en un peligro inminente.
Por otra parte, el vocero de los Guardavidas de Santa Fe dijo que, lamentablemente, en el ataque influyó la baja de los niveles del río. Cuando esto ocurre el agua suele calentarse más rápido, generando un ambiente perfecto para la palometa y otro tipo de animales marinos como las rayas.
Huelen la sangre
Tras el ataque, el Laboratorio de Ictiología del Instituto Nacional de Limnología (Inali), sostuvo a La Nación, que son muchas las especies de palometas que existen en la aguas de las costa, pero las más comunes en Santa Fe son la spilopleura, conocida como piraña, palometa brava o palometa brillante; y la nattereri, llamada palometa mora o palometa pacusa.
Los especialista precisaron que este pez perciben la sangre, por lo tanto si una muerde a alguien, lo más común es que otras se acerquen para atacar, que fue lo ocurrido, precisamente ese 28 de diciembre.
Afortunadamente las personas afectadas fueron trasladadas a un centro de salud, pero no ninguno de las mordeduras fue de gravedad. Sólo sufrieron heridas en las manos, pies y piernas.