Conmoción en Ecuador por presunto asesinato de equipo periodístico secuestrado por las FARC
Tres ciudadanos ecuatorianos permanecen secuestrados en el departamento de Esmeraldas, frontera con Colombia, por una facción disidente de las FARC. Los tres funcionarios del Diario El Comercio se encontraban realizando un reportaje en la zona cuando fueron capturados por grupos subversivos que continúan la guerrilla.
En las últimas horas, la agrupación emitió un comunicado en el que informaban que los tres secuestrados habían sido asesinados. Ante la noticia, el presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, dio un plazo de 12 horas a los secuestradores para mostrar evidencia de que los tres ciudadanos se encontraban con vida, de lo contrario se usaría la fuerza.
"Caso contrario, iremos con toda la contundencia, sin contemplaciones, para sancionar a estos violadores de derechos humanos y de todos los principios de la solidaridad. Yo acompaño en el pesar. He venido con los familiares de los queridos periodistas", dijo el Presidente en una declaración pública.
He decidido retornar inmediatamente al Ecuador por la situación crítica que vivimos en estos momentos. Regreso junto a familiares de Javier,
Paúl y Efraín.
Hasta las 10:52 horas de este viernes se esperaba una respuesta, pero nada ocurrió. Los ciudadanos ecuatorianos marcharon en las calles y frente al palacio presidencial cientos de manifestantes emplazan al Mandatario actuar ante el presunto asesinato.
Desde Colombia, el Presidente Juan Manuel Santos brindó su apoyo a Ecuador y envió a su ministro de Defensa para cooperar con las acciones que tome su par ecuatoriano. "Colombia tiene experiencia en la lucha contra estas organizaciones criminales. Y hemos puesto a disposición del Ecuador todo nuestro poderío", dijo Santos.
Hablé con el presidente de Ecuador, @Lenin Moreno, y le reiteré que tiene y tendrá todo mi apoyo, el de nuestras Fuerzas Armadas y del pueblo colombiano.
— Juan Manuel Santos (@JuanManSantos) April 13, 2018
El 26 de marzo, el equipo del diario ecuatoriano integrado por el periodista Javier Ortega, de 32 años, el fotógrafo Paúl Rivas, de 45, y el conductor, Efraín Segarra, de 60, se trasladaron a la zona fronteriza para conocer en terreno cómo viven los ciudadanos locales en medio de los enfrentamentos de la guerrilla. En ese contexto fueron capturados y presuntamente asesinados.