La dramática confesión del atleta que ganó la plata en el Maratón: "Si regreso me matarán"

El atleta etíope Feyisa Lilesa, ganador de la medalla de plata en la categoría de maratón masculino, protagonizó un acto de protesta que para muchos lo convierte en el deportista más valiente de los Juegos Olímpicos de Río 2016.

El deportista africano, que cruzó la línea de meta con las puños cerrados y las manos cruzadas sobre la cabeza, explica que su gesto es en protesta por las acciones del Gobierno de su país contra la etnia oromo, a la que pertenece, y que actualmente ha sido sometida a injusticias y obligada a abandonar sus tierras.

"Lo hice por mis familiares que están en prisión. Me da miedo hablar con ellos en la cárcel porque si hablas te matan", señaló Lilesa.

"Si regreso a Etiopia probablemente me matarán. Si no me matan, me mandarán a la cárcel. Si no me envían a la cárcel, no me dejarán salir del aeropuerto, pero yo tomé una decisión. Posiblemente me traslade a otro país", agregó.

Desde noviembre de 2015, las autoridades etíopes han asesinado a más de 400 personas y dejado miles de heridos durante manifestaciones multitudinarias. Uno de los símbolos de estas protestas es el gesto que hizo el atleta durante la carrera y en el podio.

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