Ronquidos: ¿Qué consecuencias puede conllevar y cuándo se debería consultar a un médico?
- Por Lucas Figueroa
A pesar de que es una práctica común y, por lo mismo, suele ser pasada por alto, lo cierto es que roncar puede llegar a ser algo de cuidado e incluso merecedor de una consulta con un profesional.
De acuerdo al portal Somno, "la roncopatía está subdiagnosticada, los pacientes no la consideran grave y aprenden erróneamente a convivir con ella".
De hecho, explican que el ronquido en sí es un trastorno del sueño que se produce por la vibración de las partes blandas de la garganta en el momento en que se toma aire cuando se está durmiendo.
¿Cuáles son las complicaciones de quienes roncan?
En la misma línea, se especifica que el acto de roncar puede traducirse en una enfermedad grave como es el caso del Síndrome de Apneas Obstructivas del Sueño (SAOS), el que consiste en pausas respiratorias que provocan que disminuya el oxigeno en la sangre.
En ese sentido, una persona con apnea del sueño puede exponerse a presión arterial alta, afecciones cardíacas y accidentes cerebrovasculares.
De la misma manera, puede presentar cansancio, irritabilidad y dificultad para concentrarse.
¿Cuándo debería consultar a un médico?
Así, la recomendación es consultar a un médico especialista en el caso de presentar ronquidos de manera frecuente, con el fin de descartar apnea del sueño.
Para diagnosticar las razones que nos llevan a roncar es necesario un examen de carácter físico y la realización de pruebas como la polisomnografía o la nasofibroscopía.
Vale precisar, además, que existe la posibilidad de que los roncadores presenten problemas como la hipertensión arterial, sobrepeso y hasta obesidad, por lo que la recomendación es chequear todo eso en conjunto.
Tratamientos para la apnea y/o los ronquidos
La buena noticia es que estos síntomas tienen solución. Uno de ellos es bajar de peso, en el caso de los pacientes con sobrepeso u obesidad.
Otra forma es dejar el cigarro, si es que se fuma o, en otro caso, mejorar ciertas posturas a la hora de dormir, lo que se puede trabajar con terapia posicional.
En el caso de que lo mencionado anteriormente no sea suficiente, se puede establecer el uso del CPAP, que es un dispositivo que introduce aire a las vías respiratorias evitando que estas se obstruyan.
Y por último, y como una medida más radical, puede ser necesario una cirugía, la que puede ser aplicable en el caso de que existan obstrucciones anatómicas, como desviaciones en el tabique.
Este artículo está diseñado para informar y no pretende dar consejos o soluciones médicas.
Consulte siempre a su doctor o especialista si tiene dudas sobre su salud o antes de iniciar un tratamiento.
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