Logo Mega

Este aviso se cerrará en segundos

Estos son los 4 problemas gastrointestinales más recurrentes en las personas con estrés laboral

El estómago es muchas veces descrito como el "segundo cerebro" del organismo, y es que es bastante la evidencia que respalda la conexión entre ambos. 

Por eso no es de extrañar que sientas "mariposas" en el estómago cuando estás nervioso o que pierdas el apetito cuando estás muy alterado. Estas señales de supervivencia del organismo, como el estrés y la ansiedad, también serían responsables de generar algunas complicaciones estomacales.

Ir a la siguiente nota

"La somatización sucede producto de la interconexión entre la mente y el cuerpo. Cuando la persona está expuesta a estrés prolongado, pensamientos negativos, emociones desreguladas y ansiedad, se libera cortisol y adrenalina, hormonas que son responsables de desencadenar una serie de respuestas físicas", señaló la psicóloga de Clínica Bupa Santiago, Andrea Godoy, a BioBio.

Lo mismo aplica cuando se trata de estrés laboral, es que esta emoción, sin importar cuál sea su causa, desencadena la misma reacción orgánica.

"Diversos estudios han demostrado que alrededor de un 60% de pacientes que presentan ansiedad y/o depresión por trabajo tienen más probabilidades de desarrollar alteraciones de la función intestinal", explicó en un comunicado el Dr. Francisco Rodríguez, cirujano digestivo del Hospital de La Serena, de Clínica RedSalud Elqui, y docente de la Universidad del Alba.

Conoce cuáles son algunas de las enfermedades más comunes asociadas al estrés laboral, según los especialistas.

Síndrome de colon irritable

Esta incómoda enfermedad es muy prevalente en la población mundial debido a su conexión con la salud mental. Si bien las causas exactas para esta irritación no son totalmente conocidas, sí están relacionadas con tus emociones.

"Alrededor del 60% de los pacientes con colon irritable cumplirán los criterios de uno o más trastornos psiquiátricos", explicó a WebMD, el profesor de psicología Edward Blanchard. Y el trastorno más habitual sería la ansiedad generalizada.

Es que este tipo de emociones pueden provocar reacciones como espasmos o secreción de sustancias que inflaman el sistema, empeorando el malestar.

Estreñimiento

 

Freepik

 

Según el Instituto Americano de Estrés, los periodos de estrés también pueden ser responsables de provocar estreñimiento o empeorar los síntomas de quienes tienen constipación crónica.

"Los efectos que las hormonas del estrés tienen en el organismo pueden provocar estreñimiento. Además, cuando una persona está estresada, es más probable que siga una dieta poco saludable, haga menos ejercicio o duerma menos, o se olvide de mantenerse hidratada", escribieron desde el sitio.

Según detallan en el mismo portal, preocuparte de comer suficiente fibra, tomar agua, hacer ejercicio, evitar el alcohol y los cigarros, podría ayudar a regularte en estos periodos.

Reflujo gastroesofágico

Las doctoras Toni Golen y Hope Ricciotti de la Universidad de Harvard explican que es muy probable que las personas que sufren de reflujo gastroesofágico noten que sus síntomas empeoran cuando están más estresadas.

Estrategias de relajación, además de buenos hábitos, como limitar el consumo de café, tener una dieta sana y en pequeñas porciones, no fumar, y evitar que tu última comida sea muy tarde, podría ayudar.

Gastritis

La gastritis ocurre cuando se inflama la mucosa que recubre el interior del estómago. Por lo general, se presenta cuando el sistema inmune detecta una amenaza en el sistema y produce la inflamación para así combatir la causa de la alarma.

Si bien, en teoría este es el origen del malestar, existen diferentes tipos de gastritis y una de las más comunes es la provocada por estrés.

Es que esta alteración en la salud mental es capaz de cambiar el pH del sistema digestivo, lo que desencadena una reacción que termina en la inflamación.

Afortunadamente, el tratamiento es similar a otros tipos de gastritis, aunque también se aconseja acompañarlo de terapia.

Este artículo está diseñado para informar y no pretende dar consejos o soluciones médicas.

Consulte siempre a su doctor o especialista si tiene dudas sobre su salud o antes de iniciar un tratamiento.

Todo sobre Salud