¿Te comes las uñas? Descubren simple técnica para controlar este impulso del estrés
Cuando sentimos estrés o ansiedad, una de las expresiones más comunes es morderse las uñas de los dedos, generando una malformación en la punta de nuestras manos —además de un eventual daño en la dentadura.
Pueden ser impulsos difíciles de controlar, dado que muchas veces son involuntarios hasta que cobramos conciencia de que los estamos haciendo.
La buena noticia es que la ciencia descubrió una técnica muy simple que pueden aplicar las personas que constantemente están con las uñas entre sus dientes, de modo que puedan erradicar este mal hábito. ¿Lo mejor? También se puede efectuar para controlar otros impulsos.
¿De qué trata esta nueva técnica?
Investigadores de Alemania y Canadá publicaron un estudio científico en la plataforma especializada JAMA Dermatology, en el que señalan que manifestaciones del estrés, como comerse las uñas, pueden controlarse mediante la frotación suave de la yema de los dedos en la palma de la mano o la zona posterior del brazo.
Según determinaron, si esta práctica se ejecuta mínimo dos veces al día, los impulsos del estrés y la ansiedad disminuyen su frecuencia.
"Si la persona está bajo estrés, puede realizar los movimientos más rápido, pero no con más presión", declaró Steffen Moritz, jefe de neuropsicología clínica del Centro Médico Universitario de Hamburgo-Eppendorf.
¿Cómo llegaron a esa técnica?
Durante seis semanas, los científicos estudiaron a 268 personas diagnosticadas con tricotilomanía, que básicamente consiste en "la pérdida de cabello por las ganas de jalarlo y retorcerlo hasta que se desprende", según Medline Plus, lo que también puede consistir en una manifestación del estrés.
Adicionalmente, dentro de la muestra había quienes no solo se comían las uñas, sino que además se mordían la zona interior de la mejilla. Para hacer el contraste, también se consideraron a personas que no sufrían ninguna de estas conductas.
Entre los resultados de la investigación, se observó que "el 53% de los analizados dijo que experimentó, al menos, alguna mejoría —gracias a esta técnica— en comparación con, aproximadamente, el 20% de personas en un grupo de control".
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