Ensayo clínico reveló posible y eficaz tratamiento para los cuadros más graves de coronavirus
Por el momento, el tratamiento para las personas contagiadas con coronavirus continúa siendo sintomático. Incluso en los casos de cuadros más graves, que derivan en la hospitalización, se busca disminuir la inflamación del organismo y asistir la respiración en los casos que sea necesario.
Son varias las investigaciones que buscan encontrar el fármaco o el procedimiento necesario para hacer frente a esta enfermedad. Ahora, un nuevo estudio clínico demostró lo eficaz que puede ser el tratamiento de los casos más graves de coronavirus con una proteína antiinflamatoria.
¿Cuáles son los resultados?
Se trata de la proteína alfa-1 antitripsina (AAT), encargada de proteger a los pulmones y el hígado del daño en los tejidos por la inflamación. El cuerpo naturalmente tiene una concentración aproximada de 1,5 a 3,5 gramos por cada litro de sangre, pero su administración podría ayudar al cuerpo a combatir el coronavirus.
En este estudio clínico se inyectó de forma controlada una versión purificada de la AAT, proveniente de pacientes sanos, a personas infectadas con Covid-19 y quienes presentaban síndrome de dificultad respiratoria.
Paciente con enfermedad pulmonar bullosa, en este caso con una bulla gigante (definida como la que ocupa más del 30% del hemitórax). Las causas más importantes son fumar, deficiencia de alfa-1 antitripsina, uso de drogas intravenosas, entre otras.
— Ramiro Esparza (@docramiro) November 24, 2019
Fuente: https://t.co/2CZzRPI9vN pic.twitter.com/39OttR1gUN
Este síndrome afecta directamente a los pulmones e impide que estos reciban suficiente sangre, por lo que podría producir la muerte de los diagnosticados. Por sus características, las opciones de tratamiento en personas con coronavirus y este síndrome, son escasas.
"Creemos que la AAT podría proporcionar cierta protección contra los tipos de inflamación más perjudiciales que surgen en la Covid-19 grave y en otras afecciones con un perfil inflamatorio similar", comentó el doctor Oliver McElvaney del Hospital de Beaumont.
Es que los resultados de la inyección se comenzaron a ver tras una semana de la aplicación de la proteína, con una clara disminución en la inflamación de los órganos, sin interferir con los procesos naturales de producción de AAT del organismo.
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