7 alimentos que están dañando tu corazón
Las enfermedades cardiovasculares son de las condiciones más presentes y mortales en la población chilena y en el mundo.
Durante los últimos años, los problemas cardiacos se ha posicionado como la principal causa de muerte en Chile, incluso, en tiempos de pandemia. Esto se podría deber a que más de la mitad de la población tiene diabetes, tabaquismo u obesidad, todos factores de riesgo para estas condiciones.
Parte tener una buena salud del sistema cardiovascular se deben mantener ciertos hábitos saludables, por lo que es importante estar en constante movimiento y practicar ejercicios. Por ejemplo, según nuevos estudios, actividades diarias como el lavado de platos o el aseo del hogar también contribuyen a reducir la probabilidad de enfermedades cardiacas.
Por otro lado, se tiene la influencia de los alimentos. La dieta mediterránea, gracias a su alto contenido de vegetales y alimentos ricos en fibra, es una de las más recomendadas para cuidar la salud cardiovascular. Pero ¿cuáles son las comidas más dañinas para tu corazón?
Carne Roja
Las grasas saturadas que se encuentran en las carnes rojas son de las menos recomendadas. Su consumo debería ser limitado para proteger toda la salud, es por eso que la Asociación Americana del Corazón recomienda que su ingesta no supere el 5 o 6% de las calorías diarias.
En cambio, se deberían priorizar el consumo de grasas poliinsaturadas y monoinsaturadas, las que se pueden encontrar en el aceite de oliva, frutos secos, pescados grasos como el salmón y la palta.
Mantequilla
La Sociedad Española de Arterioesclerosis recomienda disminuir las cantidades de grasas lácteas concentradas, como la que se encuentra en la crema y mantequilla. De hecho, no se deberían incluir más de dos raciones diarias de lácteos al día. No es necesario eliminarlas, porque contienen proteínas y calcio.
Sal
Está más que comprobado que la sal es responsable de enfermedades como la hipertensión, debido a la retención de líquidos que producen. El aumento en la presión sanguínea es uno de los principales factores de riesgo asociado a los infartos, accidentes cerebro vasculares e insuficiencias cardíacas.
Es por eso, que la OMS recomienda ser muy consciente del consumo de sodio en las dietas, para así no superar los 2 miligramos diarios.
Alcohol
El alcohol nunca es bueno para la salud, pero según un estudio, peor que consumir un poco de alcohol todos los días, ser un bebedor de altas cantidades solo los fines de semana sería mucho peor. Según expertos de la Universidad de Harvard aseguran que este tipo de bebedor es un 72% de probabilidades de tener un ataque cardiaco.
Panadería industrial
Los berlines, panes enriquecidos y postres horneados que puedes comprar en panaderías y supermercados, son productos altos en grasas trans. Estos ácidos grasos pasan del sistema digestivo al torrente sanguíneo, en dónde se "roban" el espacio de otras grasas, generando que estas queden libres fluyendo en la sangre. Eventualmente, esto produce que aumenten indicadores como el colesterol en la sangre.
Si bien diversos organismos recomiendan limitar su consumo, existen expertos que invitan a eliminar por completo las grasas trans de la dieta "porque su consumo se ha relacionado con el aumento de enfermedades cardiovasculares, del colesterol 'malo', sobrepeso y diabetes del tipo 2", explicó la nutricionista Ángela Moreno a La Vanguardia.
Bebidas carbonizadas
No se sabe bien si es la cafeína, el gas, los preservantes o endulzantes que contienen son las que aumentan las posibilidades de padecer una enfermedad cardiovascular. Es que ni siquiera tomar las versiones bajas o sin azúcar te podrá ayudar, simplemente no la deberías consumir.
Pizza pre cocida
Por muy salvadoras que puedan ser, la mayoría de los productos congelados como la pizza, empanadas, pastas o nuggets, contienen altos niveles de grasas trans. Si consumimos regularmente estos alimentos, sumado a los malos hábitos para el corazón, podrías ponerte en un riesgo innecesario.
Este artículo está diseñado para informar y no pretende dar consejos o soluciones médicas.
Consulte siempre a su doctor o especialista si tiene dudas sobre su salud o antes de iniciar un tratamiento.
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