¿Quedaste deshidratado? Esta es la cantidad de agua que deberías tomar al día
Después de una fiesta demasiado intensa, los dolores de cabeza, cansancio y malestares estomacales son una constante. Es que se toma mucho alcohol y poca agua, además de consumir mucha comida.
Mantenerte hidratado podrá mejorar, casi de inmediato algunas de las secuelas de los excesos de las festividades. Es que la constipación, infecciones urinarias, deshidratación de la piel podrían solucionarse fácilmente con el consumo adecuado de agua.
Pero cada vez hay más información, números, escalas y calculadoras con los litros que debería consumir una persona. No todo sería tan fácil como un cálculo matemático. Por lo que acá conocerás cuánta agua es la que debes tomar.
¿Solo cuenta el agua?
Para mantenerte verdaderamente hidratado existe más de una fuente de líquidos a la que puedes recurrir. A diferencia de lo que puedes haber escuchado, bebidas azucaradas, jugos, café y té cuentan como líquidos, solo que nada supera el agua.
De hecho, un estudio en 72 hombres comparó los efectos hidratantes del café, cerveza y agua, y llegó a la conclusión que estos son casi los mismos.
Las comidas también son una de las formas de obtener líquidos, es el caso de las frutas, verduras, salsas y sopas que forman parte de cualquier dieta.
¿Cuánta agua debo tomar?
¿8 vasos o más de dos litros? La verdad es que no existe una respuesta fija y universal, ya que cada cuerpo es único en tamaño, temperatura, sudoración, todos son factores que determinarán la cantidad de agua que podrías necesitar.
Según los expertos, la mejor forma de saber si estás deshidratado o si debes tomar más agua, es estar atento a las señales naturales que da tu cuerpo. O sea, si tienes sed, toma agua.
¿Si tomo mucha agua significa que estaré muy sano?
La verdad es que no, a lo más, las personas con riesgo de padecer cálculos renales los podrían evitar, pero el resto de las personas sanas no verían mayores beneficios.
Incluso, llevado a un extremo, se corre el riesgo de sufrir por sobre hidratación. Esto ocurre cuando consumes mucha más agua de la que los riñones es capaz de procesar, causando que se acumule en el torrente sanguíneo. Esto puede dejar a una persona con náuseas, vómitos, dolo de cabeza y confusión.
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