Cómo retomar la rutina de sueño después de las vacaciones de invierno
Las vacaciones de invierno llegan pronto a su fin y con ello también se acaban las rutinas más relajadas y desordenadas. También se acabarán los días de levantarse más tarde y tomar siestas, para volver a horarios más estrictos.
Pero volver a la rutina puede ser una tarea muy complicada, tanto para adultos como para niños.
Los horarios en nuestro cuerpo, como los horarios para dormir o levantarse, están regidos por el reloj circadiano y si este se desordena pueden aparecer trastornos del sueño, como insomnio o somnolencia diurna, que pueden afectar el desarrollo de la vida laboral o escolar.
“Esa falta de orden en el sueño genera que nuestro reloj interno no pueda sincronizarse de manera correcta al volver a la rutina, lo que se puede traducir en cansancio y fatiga, siendo más difícil volver a nuestro día a día”, explicó Manuela García, psicóloga de Clínica Somno.
Los expertos del sueño recomiendan seguir seis consejos para poder retomar la rutina:
Acuéstate y levántate más temprano
Idealmente durante la semana acuéstate, paulatinamente, entre 20 a 50 minutos más temprano de lo que te estabas acostando durante las vacaciones. Con esto acostumbrarás lentamente a tu cuerpo, sin forzarlo. Trata también de despertarte más temprano.
Regula tus horas de sueño
Procura retomar tu rutina de horarios e intenta que cada noche alcances a dormir entre 7 y 8 horas.
Siestas
Si todavía tienes la posibilidad de dormir siestas, intenta que estas no duren más de 30 minutos. Si puedes evitarlas, mejor todavía, porque así será más fácil conciliar el sueño cuando llegue la noche.
El dormitorio
Trata de eliminar de tu habitación los aparatos electrónicos que generan luz azul, como el celular o la televisión.
La luz azul disminuye la secreción de melatonina, que es la que induce el sueño. Si ves televisión o no sueltas el celular al momento de ir a acostarte, tu cerebro dejará de producir la melatonina necesaria y podrías dar paso a eventuales problemas de insomnio.
Hidrátate y come liviano
Trata de tomar agua durante todo el día y no solo un par de horas antes de dormir, o si no interrumpirás tu sueño con incontables idas al baño.
Evitar comidas muy pesadas o picantes antes de dormir te ayudará a no sufrir de incómodos malestares, como el reflujo, mientras trates de conciliar el sueño.
Ejercicio
Cualquier tipo de deporte siempre ayudará a mejorar tu calidad de sueño, pero si lo practicas, es bueno que sepas que la hora ideal es en la mañana. Si no puedes, la recomendación es que lo hagas máximo dos horas antes de irte a dormir para que tu cuerpo no esté demasiado caliente al momento de acostarte.
Este artículo está diseñado para informar y no pretende dar consejos o soluciones médicas.
Consulte siempre a su doctor o especialista si tiene dudas sobre su salud o antes de iniciar un tratamiento.
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