Desde alucinaciones hasta ataques de pánico: Estas son las consecuencias de no dormir
Las consecuencias de tener el hábito de no dormir o de tener un mal sueño pueden llegar a ser realmente devastadoras, al punto de provocar en el individuo paranoia e, incluso, alucinaciones.
Una noche de no descansar puede tener efectos directos en el cerebro, como la falta de concentración y que dicho órgano trabaje a un ritmo más lento, así como generar hinchazón en los ojos, irritabilidad y somnolencia, detalla el Daily Mail.
Un cerebro demasiado agotado por la falta de horas de sueño también es capaz de llevar en picada el deseo sexual o la excitación, pero ésta es apenas la antesala de las consecuencias de esta importante afección de salud.
Estos son los efectos de no dormir en el cuerpo
El medio inglés citó al experto en insomnio y sueño Hussain Abdeh, quien trabajó con la empresa especialista en colchones del Reino Unido, Otty, sobre los análisis de los síntomas adversos y las consecuencias de no dormir durante 24 horas, 72 horas, una semana y un mes.
Si bien una persona no puede sobrevivir a un mes sin disfrutar del sueño, puede experimentar el microsueño, que implica la pérdida breve de la conciencia o episodios de hasta dos minutos de desconexión, en los que caemos dormidos y nos desconectamos del entorno, según Mejor Con Salud.
Para Abdeh esto puede ser fundamentalmente peligroso y podría ocurrir que la persona comience a experimentar microsueño por períodos más extensos y seguidos. Aseguró que las secuelas por la falta de dormir van en aumento, conforme al tiempo de la falta de descanso.
¿Llegar a las alucinaciones?
Cuando las personas no tienen una buena noche de sueño pueden experimentar temblores y la tendencia a reaccionar de manera negativa ante situaciones en las que no lo haría en condiciones normales. Pero después de tres noches las complicaciones se acentúan.
Una tez más pálida, dolores corporales, bajo estado de ánimo y llegar a padecer alucinaciones y paranoia son algunas de las secuelas de no dormir en 72 horas. Eso sin contar con la sensación de sentirse separado del cuerpo y estar más como un “observador”.
En una semana con el padecimiento de la privación del sueño el cuerpo experimenta un gran estrés, la persona sufre de debilidad, la piel padece de sequedad y deriva en un aumento de las arrugas, por la falta de humedad que se produce al reducirse los niveles de Ph y colágeno, que se reparan durante el descanso.
En ese punto, según Daily Mail, se llega a perder el control entre lo que se piensa y se hace. A un mes de mal dormir son mayores las complicaciones, de manera que un individuo puede sufrir de ataques de pánico, demencia, menopausia súbita en las mujeres e impotencia en los hombres. También de mayor riesgo de padecer enfermedades.
Este artículo está diseñado para informar y no pretende dar consejos o soluciones médicas.
Consulte siempre a su doctor o especialista si tiene dudas sobre su salud o antes de iniciar un tratamiento.
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