No te engañes: Si no consumes estas semillas no llevas una dieta saludable
Para llevar una dieta realmente saludable no hay que dejarse llevar por modas o lo que la industria alimentaria decide que será el siguiente súper ingrediente. En lugar de eso, se debe priorizar comida rica en una variedad de nutrientes.
Las semillas, como grupo, son una de estas. Si bien todas aportan cosas diferentes, son conocidas por tener una alta composición. Tienen altos porcentajes de fibra que ayudan a los intestinos. Son altos en grasas sanas y fitoesteroles, moléculas que ayudan a reducir los niveles de colesterol.
¿Cómo consumirlas?
Con remojo o sin remojo. Algunas personas recomiendan “activar” las semillas antes de comer. Esto se hace remojándolas durante una noche, como se hace con las legumbres.
En el caso de la linaza y la chía, liberan una sustancia viscosa conocida como mucílago, que aumenta el porcentaje total de fibra. Para las otras, lo ideal es molerlas, para que el estómago trabaje menos tratando de digerir la cutícula dura que las rodea.
Semillas de calabaza
Su mayor contenido es el Omega-3 y 6 responsable de la formación de membranas celulares y como nuestro organismo no es capaz de producirlo, es fundamental incluirlo en la dieta.
Es rica en hierro mineral que interviene directamente en la producción de glóbulos rojos, encargados de trasladar oxígeno por el cuerpo.
Además, ha estado directamente relacionada con la salud de la próstata, gracias a que tiene cucúrbita.
Semillas de cáñamo
Se caracterizan por tener los 9 aminoácidos esenciales, por lo que se considera una fuente completa de proteína vegetal. De hecho, sus porcentajes son más altos que en otros alimentos como el cordero o la carne de vaca. En proporción, 2 o 3 cucharadas entregan aproximadamente 11 gramos de proteína.
Gracias a su contenido en vitamina A, C y E son considerados buenos antioxidantes. Son una buena fuente de fibra que aporta a la sensación de saciedad.
Semillas de maravilla
Pueden ser un ingrediente particularmente importante para los deportistas por el alto contenido de potasio y magnesio, este último también ayuda a mantener un buen funcionamiento del cerebro.
Semillas de sésamo
Es tan alto en calcio que puede ser considerado como un sustituto de los lácteos para las personas con restricciones alimenticias. Además, está cargado con lectina, un lípido que ayuda a disminuir grasas, principalmente colesterol “malo”.
Semillas de linaza
Muy recomendadas para regular el tránsito intestinal por los altos índices de fibra soluble o insoluble. Además, es alta en Omega-3, 6, hierro, calcio, fósforo y magnesio.
Semillas de chía
También está cargada con proteínas vegetales, por lo que es muy recomendada. Y su alto contenido en ácido graso linoleico, pariente del Omega-3, también la hace parte de una dieta verdaderamente sana.
Este artículo está diseñado para informar y no pretende dar consejos o soluciones médicas.
Consulte siempre a su doctor o especialista si tiene dudas sobre su salud o antes de iniciar un tratamiento.
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