Lo que puedes y lo que no debes hacer para desinfectar los utensilios de madera de tu cocina
En la cocina, los utensilios de madera son un clásico. La versatilidad del material y su durabilidad lo hacen uno de los preferidos al momento de comprar. No importa si son cucharas de palo, espátulas, tablas o molinillos de este material que son frecuentemente utilizados, pero ¿sabías que debes desinfectarlos regularmente?
La madera es un material poroso que puede acumular restos de comida y humedad, y por lo mismo pueden mantener malos olores.
Si bien el mercado ofrece limpiadores de grasa, estos pueden ser muy abrasivos, por lo que dañan el material y, aun así, no son capaces de remover los pequeños restos que se pueden acumular.
Es importante recordar, que sin importar qué método de limpieza se utilice, la madera debe estar bien seca antes de guardar.
¿Con qué puedo desinfectar los utensilios de madera?
Agua caliente y jabón
Esta es la forma más rápida y la más fácil de limpiar cada vez que se utilice algún elemento de madera. Para esto se deben sumergir por un corto tiempo los utensilios en agua a alta temperatura (mejor si fue hervida). En un primer momento el agua caliente debilitará los restos pegados, y luego se frota la superficie con jabón para eliminar toda el resto.
Limón
Esta fruta es de gran ayuda al momento de desinfectar en la cocina, muchos los utilizan en parrillas, ya que permite desengrasar y eliminar malos olores. En la madera, se puede esparcir el jugo por toda la superficie, enjuagar y secar bien.
Bicarbonato de Sodio
En el caso de que tengan manchas de salsa, por ejemplo, el bicarbonato es un excelente removedor. Lo ideal es preparar una pasta de bicarbonato con limón y frotar suavemente con una toalla hasta que la mancha desaparezca.
Vinagre
Con una mezcla de agua y vinagre, en partes iguales, se pueden eliminar los malos olores de la madera. Solo es necesario dejar remojando el utensilio por no más de 20 minutos en la mezcla, luego enjuagar y secar bien.
Aceites
Los aceites, más que limpiadores, permiten mantener las terminaciones y la calidad de la madera. Durante 15 minutos se puede frotar aceite, como el de coco, para mantener la suavidad de la madera. Es necesario enjuagar con agua caliente antes de dejarlo secar.
¿Qué no debo hacer?
El lavavajillas no es una opción para lavar estos utensilios, ya que al interior de estas máquinas se trabaja con agua a altas y bajas temperaturas, además los ciclos de lavado son muy largos. Estas características podrían promover la proliferación de bacterias en la madera.
Lo mismo aplica para el remojo prolongado en agua, ya que el líquido se filtra en los poros promoviendo la humedad y arriesgando que se cultiven hongos o bacterias.
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