Los trucos para sacar la grasa pegada en tu cocina

Demás está decir que cocinar desde la comodidad de nuestro hogar es mucho más sano y hasta divertido, ya sea porque se comparte en familia, se inventan nuevas recetas y hasta se pasa un rato agradable. Es como un centro de conversaciones y anécdotas. 

Sin embargo, lo parte que menos nos gusta es que después de una buena comida, hay que limpiar todo. Desde la loza, cubiertos y vasos, hasta la cocina que suele quedar hecha un desastre y más cuando usamos aceite, ingrediente que suele pegarse como goma de mascar en la superficie de esta.

De acuerdo al sitio Mejor con Salud, las grasas de los alimentos y otras sustancias que se desprenden al cocinar van quedando impregnadas en los electrodomésticos, puertas y muchas otras áreas de la cocina.

Algunos piensan que una buena opción es hacer uso de productos químicos para facilitar su eliminación; no obstante, existen otro trucos fáciles y prácticos que pueden hacer de esta tarea algo más fácil y aquí te las presentaremos.

Pero, ¿cuáles son estos tips?

Como siempre es una necesidad mantener la casa o el departamento limpio, especialmente la cocina por ser una de las zonas centrales del hogar, te presentamos dos trucos fáciles y con ingredientes disponible en tus manos para hacer que este espacio brille y quede como nueva. 

Jugo de limón 

• Diluye el jugo de uno o dos limones en un litro de agua caliente.
• Sumerge una esponja en la mezcla y frotala sobre la superficie que quieras limpiar.
• Repite esta acción todas las veces que sea necesario y termina enjuagando.

El limón y el bicarbonato son buenos aliados/ Pixabay 

Bicarbonato de sodio

• Esparce bicarbonato de sodio sobre la superficie que quieras limpiar (la cantidad que consideres necesaria) y luego frota con una esponja para remover las grasas.
• Es muy probable que la debas humedecer para facilitar la tarea. Para esto puedes usar un poco de agua o jugo de limón.

Vinagre de manzana

• Diluye el vinagre de manzana en el agua y llévalo a ebullición.
• Cuando esté listo, déjalo reposar y humedece la esponja o el trapo con el que vayas a limpiar.
• Repite la aplicación cuantas veces sea necesario y aclara con agua fría.
• La mezcla restante puedes guardarla en un recipiente plástico y usarla en la siguiente ocasión.