Consejos que debes tomar en cuenta al momento de escoger un juguete para tu perro

Jugar con tu perro es tan importante como su alimentación e higiene, y escoger el juguete adecuado para ese amigo es muy relevante en cualquiera de sus etapa de vida.

Bien sea la cuerda que no deja de morder o la pelota que nunca se cansa de atrapar, estos implementos forman parte del bienestar de estos consentidos de la casa.

Al respecto, el sitio especializado en cuidados de mascotas HillsPet recomienda tomar en consideración edad de la mascota, tamaño y textura del juguete, a la hora de comprar objetos para el entretenimiento del perro.

Edad

Si tienes un cachorro, de unos tres meses, lo ideal es que escojas juguetes de goma muy blanda o de tela. Ahora, si ya el animal tiene entre tres y nueve meses, evita los juguetes de goma dura.

Por otro lado, en el caso de un perro de siete años es importante tener en cuenta que ya se ha convertido en un can senior, por lo que sus dientes y mandíbula no tendrán la misma fuerza. Es importante mantener juguetes más fáciles de morder que le ayuden a mantenerse activo.

Tamaño y textura

La resistencia del juguete también es un punto que debes considerar, ya que si es poco consistente, tu perro podría tragarse o aspirar fragmentos del mismo, pudiendo atragantarse, tener problemas gastrointestinales o ahogarse.

El tamaño de este es importante pues si es muy pequeño tu perro podría tragarse fácilmente. Ten en cuenta que si el juguete es lo suficientemente pequeño para caber detrás de sus molares, es un factor de riesgo.

Los materiales más recomendados en la fabricación para los perros son nylon, látex, vinilo, caucho natural y felpa. Y para quienes adoran los peluches, los especialistas no los descartan, pero si recomiendan que el perro esté bajo supervisión cuando esté jugando con este tipo de objetos. Explican que los materiales de los peluches no son lo suficientemente resistentes a los jalones o mordiscos del perro, por lo que se podrían romper y esos componentes afectar la salud de can, porque podrían comerse algunas partes.