Vacuna contra la influenza: ¿Cuándo empieza y para quiénes será obligatoria?

Aún faltan meses para que llegue la estación más fría del año, pero en el Ministerio de Salud ya está todo listo para implementar la Campaña de Invierno 2025, consistente en la vacunación contra la influenza.

El pasado martes 11 se concretó uno de los preparativos más importantes de la iniciativa: la publicación del decreto que establece la obligatoriedad de la inoculación para los grupos de riesgo y la fecha en que comenzará, junto con otras disposiciones.

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Recordar que la influenza es una enfermedad respiratoria aguda de origen viral, considerada un problema de salud pública por su elevado potencial epidémico, provocando aumentos de la demanda de atención ambulatoria y hospitalaria y aumento de morbimortalidad (tasa de muertes en un tiempo determinado).

Dada su peligrosidad y para evitar colapsos en la red sanitaria, la ministra subrogante de Salud y subsecretaria de Salud Pública, Andrea Albagli, expresó que "vacunarse tempranamente es aún más importante ahora. Los inviernos posteriores a la pandemia se han caracterizado por tener una circulación viral más temprana dentro del año".  

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¿Cuándo empieza y para quiénes es obligatoria la vacuna contra la influenza?

Al igual que en años anteriores, la campaña de vacunación contra la influenza comenzará en marzo y su aplicación será obligatoria para todas las personas que compongan los siguientes grupos de riesgo:

  • Personal de salud (todos los trabajadores, incluso quienes realicen labores administrativas o logístico; en consultas médicas o dentales, ambulatorias y particulares).
  • Personas de 60 años y más.
  • Gestantes, en cualquier etapa del embarazo.
  • Lactantes y escolares, desde los 6 meses y hasta 5º año básico.
  • Estrategia capullo para familiares de lactantes prematuros menores a 37 semanas.
  • Estrategia capullo para familiares de lactantes inmunosuprimidos menores de 6 meses.
  • Trabajadores de la educación preescolar y escolar hasta 8º año básico.
  • Trabajadores de avícolas, ganaderas y criaderos de cerdos.
  • Cuidadores de adultos mayores y funcionarios de los Establecimientos de Larga Estadía para Adultos Mayores (ELEAM).

También están contemplados los enfermos crónicos, entre los 11 y los 59 años de edad, que sean portadores de alguna de las siguientes condiciones de riesgo:

  • Enfermedad pulmonar crónica (asma bronquial, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, fibrosis quística, fibrosis pulmonar de cualquier causa).
  • Enfermedad neurológica (neuromusculares congénitas o adquiridas).
  • Enfermedad renal crónica (insuficiencia renal en etapa 4 o mayor, diálisis).
  • Enfermedad hepática crónica (cirrosis, hepatitis crónica, hepatopatías).
  • Enfermedades metabólicas (diabetes mellitus, enfermedades congénitas del metabolismo).
  • Cardiopatías (congénitas, reumática, isquémica y miocardiopatías de cualquier causa).
  • Hipertensos en tratamiento farmacológico.
  • Obesidad (IMC mayor a 30 en adultos y adolescentes).
  • Enfermedades mentales graves (esquizofrenia, trastorno bipolar).
  • Enfermedad autoinmune (lupus, esclerodermia, artritis reumatoide, enfermedad de Crohn, y otras).
  • Cáncer en tratamiento con radioterapia, quimioterapia, terapias hormonales o medidas paliativas de cualquier tipo.
  • Inmunodeficiencias congénitas o adquiridas.

La meta de vacunación contra influenza es de 85% a nivel nacional y por grupo objetivo, de acuerdo a lo que establece el mencionado decreto.

¿Cuáles son los síntomas de la influenza?

Según detalla el Ministerio de Salud, la influenza se transmite desde una persona enferma al toser, estornudar o mediante las secreciones nasales. Aafecta principalmente a la nariz, la garganta, los bronquios y ocasionalmente los pulmones.

Su contagio dura cerca de una semana y se caracteriza por la aparición súbita de fiebre alta, dolores musculares y de cabeza, malestar general fuerte, tos seca, dolor de garganta e inflamación de la membrana de la nariz (rinitis). En algunas personas se presenta como secreción nasal, náuseas, vómitos y diarrea. La tos puede ser intensa y durar dos semanas o más.