Empresa de tecnología cierra sus operaciones por millonaria deuda y pone en jaque la portabilidad numérica

La justicia finalmente dictaminó el cierre de Adexus, empresa que desarrolla productos y servicios relacionados con las tecnologías de la información y las comunicaciones. La compañía, que había solicitado su liquidación voluntaria en abril de 2024, tiene deudas superiores a $22 mil millones.

Su mala situación financiera data de 2018 —al año siguiente solicitó una reorganización judicial para evitar la quiebra, no para que se declarase— y con el paso de los años no pudo recuperarse financieramente debido a la falta de liquidez y de activos, sumado a otros factores que detalló en una demanda ingresada a un juzgado civil de Santiago.

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El contexto económico era tan crítico, que Adexus tenía demandas de diferentes acreedores, los que le exigían el cumplimiento de contratos (que pagase la cifra monetaria acordada entre las partes, por ejemplo).

Así se definió el cierre de Adexus

Como sucede judicialmente en este tipo de casos, los acreedores de Adexus se reunieron para definir la continuidad de las operaciones de la empresa. El resultado fue la identificación de una imposibilidad en la recuperación de la viabilidad financiera, decretándose así el término de la continuidad provisoria del giro que le permitía seguir funcionando.

 

 

Los acreedores también acordaron no vender la compañía como una unidad económica, lo que conlleva el cierre de sus operaciones.

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Para compensar una parte de la millonaria deuda, se analiza una oferta que llegó por el data center que utilizaba Adexus, lo que judicialmente se denomina "bien mueble esencial". El ofrecimiento es un pago directo de $30 millones que se aprobará o rechazará el martes 30 de julio, cuando los acreedores se vuelvan a reunir.

Además, se venderá el mobiliario de las oficinas ubicadas en calle Miraflores y de sus bodegas arrendadas en la capital. Un hecho insólito es el precio que tendrán los computadores portátiles: cada uno se subastará desde los $40 mil.

El problema que genera el cierre de Adexus

Según consigna La Tercera, el mayor problema que genera el cierre de Adexus tiene que ver con las telecomunicaciones. Resulta que en 2020, después de obtenerla dos veces, Adexus no ganó la licitación del Organismo Administrador de la Portabilidad Numérica, mediante el cual se administra la base de datos de portabilidad y mantiene la comunicación entre los operadores de telefonía.

La empresa que se lo ganó fue Iconectiv LLC; sin embargo, esta subcontrató a Adexus para que le prestara los servicios de su data center (el mismo que recibió la oferta de $30 millones) para contener los datos de los clientes que se cambian de compañía móvil, manteniendo el mismo número telefónico.

Desde la Subsecretaría de Telecomunicaciones informaron que Iconectiv LLC tendrá que buscar un nuevo data center y deberá hacerse responsable de la seguridad de los datos durante la migración de los antecedentes al nuevo terminal.

Si bien no se han detectado problemas entre las compañías de telefonía (tampoco en su clientela), la Subtel las oficiará para identificar eventuales irregularidades.

Los orígenes de la crisis de Adexus

De acuerdo a la demanda presentada en abril de este año, la entidad solicitaba la declaración de su liquidación voluntaria por su inviabilidad económica. En 2019 había pedido su reorganización judicial como un intento para reestructurar sus activos y pasivos, asegurándoles a sus acreedores que se recuperaría gracias a dos situaciones, las que finalmente no ocurrieron.

Una consistía en el ingreso de dos nuevos inversionistas, los que iban a comprar Adexus; y la segunda, en una deuda que le pagaría el Fondo Nacional de Salud (Fonasa). Sin embargo, en 2024, los dos interesados no continuaron en las negociaciones y Fonasa "ha insistido con dilaciones administrativas y judiciales que han entorpecido el giro del cheque de dichos fondos", expresó en su recurso legal.

"Adexus no pudo cumplir con el acuerdo aprobado (por los acreedores), y devino en una empresa insolvente, incapaz de pagar a tiempo sus obligaciones económicas o deudas contraídas (...) A lo anterior, se suma el hecho de que carece de activos suficientes para hacer frente a sus obligaciones más inminentes", expresó en el escrito la organización cuya quiebra ya está decretada.