Empresa dueña de conocida marca de calzado se querella contra trabajador: Lo acusa de estafa por $137 millones

El holding Colgram —que reúne a las conocidas marcas Colloky, Opaline y Zolkan— presentó una querella criminal en contra de uno de sus trabajadores, a quien apunta como el autor de un presunto fraude millonario cometido mediante sabotaje informático y estafa.  

A través de un documento presentado al 6° Juzgado de Garantía de Santiago, la compañía especializada en la confección y distribución de ropa de bebé y calzado detalló el modus operandi con el que el sospechoso habría desviado más de $137 millones de la empresa.

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¿Cómo se produjo el supuesto fraude a Colgram?

En la querella —obtenida por Meganoticias.cl—, el abogado Matías Balmaceda relató que a principios de agosto pasado se detectaron irregularidades en el pago de proveedores, lo que motivó una investigación interna.

Fue así que las sospechas se depositaron sobre su analista financiero, cuya misión era transferirle precisamente a los proveedores y que "había estado realizando reiteradamente un fraude interno a la empresa a través de la desviación de los fondos", se lee en el documento.

Según la acusación en contra del empleado, él trasladaba la deuda y realizaba transacciones directas mediante la modificación de las facturas destinadas al pago de los proveedores.

El supuesto modus operandi

El presunto esquema defraudatorio que acusa Colgram consistía en, primero, la emisión semanal de una nómina que identificaba las facturas, boletas y comprobantes en un Excel. Todos estos documentos eran enviados a la administración, que priorizaba la realización de los pagos en la misma semana que eran recibidos.

Luego, esa área devolvía los archivos con marcas y observaciones si es que había que corregirlos. "A partir de esa confirmación, el analista financiero generaba la nómina de pagos, recopilaba los respaldos para cada uno de ellos, extrayendo los documentos correspondientes y eliminaba las partidas sin respaldo", expuso Balmaceda.

Cuando tenía la nómina de pago en sus manos, "ingresaba con su cuenta de usuario al sistema interno y ejecutaba una serie de transacciones fraudulentas. Con su usuario se destinaron dineros de fondos de otros proveedores, trasladando la deuda, o realizando transacciones directas", se acusa.

 

Imagen referencial (Freepik)

 

Lo más grave de la situación está en que, posteriormente, el trabajador intervenía el Excel para modificar las tiendas y las sucursales bancarias "donde depositan los proveedores, a quienes se pagaban las respectivas facturas y los montos de estas".

"Abusando de su cargo y de la confianza que su empleador había depositado en él, el imputado ejecutaba diversas transacciones fraudulentas a la cuenta bancaria del proveedor de una empresa de servicios (...) por obras que no había prestado o por montos superiores al cobro de los servicios efectivamente prestados", agrega la querella.

Previamente concertado entre ambas partes, el representante legal de la empresa de servicios le hacía un pago al analista financiero, lo que correspondía a una "comisión" con los fondos supuestamente defraudados, dando fin al eventual esquema fraudulento.

 

Imagen referencial (Freepik)

 

Entre enero de 2022 y julio de 2023, el representante de la mencionada empresa recibió 24 transferencias realizadas desde la cuenta corriente de Colgram, lo que equivale al movimiento de un monto total de $194.131.149.

De esa cifra, hay un respaldo de facturas emitidas por $56.428.372. Por lo tanto, el monto que se habría defraudado corresponde a $137.702.777.

En su querella —que también va en contra de todos aquellos que resulten responsables, en calidad de autores, cómplices o encubridores del presunto fraude—, Colgram exige que se aplique el presidio mayor en grado medio; vale decir, 15 años de cárcel efectiva.

Este artículo informa de un proceso judicial en curso, por lo que los involucrados no deben ser considerados culpables hasta que los organismos pertinentes lo determinen.

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