Familias demandan a inmobiliaria: Acusan tardanza de 2 años para recibir sus casas y pagos extra de $30 millones
- Por Nicolás Díaz
¿Qué pasó?
Amparados en la Ley del Consumidor, un grupo de familias demandó a una inmobiliaria que se atrasó hasta dos años en entregarles sus casas. Esto implicó que los bancos subieran casi al doble su tasa de interés, teniendo que pagar hasta $30 millones más por sus créditos hipotecarios.
Meganoticias Reportajes se reunió con varias de las familias afectadas, las que vieron truncados su anhelado sueño de la casa propia, ya que les significó quedar altamente endeudados. Además, acusan que tras la entrega de las viviendas, estas fueron modificadas totalmente sin previo aviso.
El sueño truncado de la casa propia
María José Fernández se acercó en 2019 a la Inmobiliaria Alto Maule para comprar una casa en Talca. Le prometieron una vivienda dentro de condominio, con accesos controlados y dos estacionamientos: nada de eso se cumplió.
"Ellos modificaron de forma arbitraria el proyecto. Ellos me ofrecieron una seguridad que hoy en día no está: mi casa está afuera del condominio", dice entre lágrimas por la impotencia que ha significado la situación.
A los cambios al proyecto se suman también los constantes atrasos en la entrega de las casas. Con una fecha original de entrega en marzo de 2021, a María José le entregaron su casa recién en julio de este año.
Este atraso significó además que las tasas de su crédito hipotecario se elevaran considerablemente. De hecho, al momento en que le iban a entregar su casa ya no calificaba y tuvo que pedirle prestado a sus familiares y amigos $15 millones para poder dar un pie y no perder la casa que tanto esperaba.
"Sobre $30 millones extra tuvo que pagar cada uno de nosotros por sus casas, en algunos casos incluso bordeando los $50 millones", dice Georgette Torres, otra de las afectadas, quien trasladó a toda su familia desde Santiago a Talca con el sueño de encontrar una mejor calidad de vida.
"Hubo familias que tuvieron que desistir del sueño de la casa propia porque no podía costear este monto adicional y por cada casa que se desistió, la inmobiliaria recibió 1.000 UF adicionales", agrega la mujer que desde agosto de 2021 tuvo que pagar un arriendo diario para vivir mientras esperaba la entrega de su casa.
Práctica común
El último punto destacado por Georgette es clave, ya que según el presidente de la Corporación Nacional de Consumidores y Usuarios (Conadecus), Hernán Calderón, estos retrasos en las entregas son una práctica común de las inmobiliarias.
"Lo que buscan las empresas muchas veces es que la gente se canse, se aburra de esperar la entrega de la vivienda y poder venderla a un precio superior", dice Calderón.
Hasta el momento cuatro familias interpusieron recursos ante el Sernac por los atrasos, y otros ocho propietarios demandaron ante un Juzgado de Policía Local, que se declaró competente para realizar la tramitación judicial.
Pese a esto, existe un vacío legal, ya que al tratarse de "promesas de compraventa" no son considerados como un contrato definitivo por todos los tribunales y algunos se declaran incompetentes para admitir estas demandas.
Aun así, según explica el profesor de Derecho Económico UC, Felipe Bravo, tanto la Corte Suprema como las Cortes de Apelaciones "han reconocido que en la promesa de venta de bienes inmuebles existe un consumidor", por lo tanto, al menos sí es aplicable la Ley del Consumidor.
La Inmobiliaria Alto Maule no quiso recibir al equipo de Meganoticias Reportajes, indicando mediante un comunicado que los cambios en el proyecto fueron subsanados, que las personas que no quedaron conformes siguieron la vía legal y que los retrasos tuvieron su origen en la pandemia de coronavirus que afectó a la industria nacional de la construcción.
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